Como seguidor del "slasher" genuino, siempre es un placer para el alma darse de bruces con títulos de aquellos entonces que permanecían ignotos para mi. O, simplemente, que no me llamaron la atención en su época (como este del que les hablo hoy). Por pura lógica, estos "restos" no son precisamente lo mejor del catálogo... pero bueno, eso tampoco impide que me enfrente a ellos con pasión... aunque sea a altas horas de la madrugada, algo que en ocasiones, y si la peli invita, convierte estos visionados en experiencias casi psicotrópicas. "Creando el terror" es lo suficientemente caótica y desmadrada para preguntarte, con ayuda de un poco de sueño, si no habría algo raro en el vaso de leche.
Un asesino vestido con un disfraz de oso (la mascota del equipo de basquet) y unos cuchillos colocados en plan garra, se dedica a matar a todas las estudiantes que puede durante una noche en la que se celebra una especie de absurda "gincana". Todo ello va relacionado con un asesinato ocurrido años atrás por un cornudo, que acabó en el manicomio. Claro que este ha muerto, así que ¿quién está cometiendo los crímenes?.
"Creando el terror" ("Scaremaker" o "Girls nite out" en USA) es, como decía al inicio, un puto caos. La historia arranca de sopetón, a trompicones, y durante un buen rato te preguntas que qué cojones está pasando. Abundan -demasiado!!- los personajes irritantemente graciosillos (hay dos genuinamente insoportables), las chicas son especialmente golfas (al fin y al cabo la esencia de la trama gira en torno a la infidelidad), los asesinatos algo sangrientos, pero tampoco mucho y, ¡ops!, no hay ni un solo seno femenino a la vista.
El reparto es bastante raro. De entrada el único rostro genuinamente reconocible es el del gran Hal Holbrook. Pero si pones un poco de atención, te encontrarás con otros: Rutanya Alda (la mamá sufriente de "Amityville 2"), David Holbrook (hijo de Hal y "Gordi" en "Creepshow 2"), Lauren-Marie Taylor (la niña mona/sosa de "Viernes 13 - 2ª parte"), Carrick Glenn (que enseñaba las ubres en "La quema") o Richard Bright (al que yo recordaba como poli en "Ola de crímenes, ola de risas" pero que tiene un curriculum muy lujoso en el que figura la trilogía de "El Padrino"). Este último interpreta al oficial que investiga los crímenes... y cuando en un slasher intervienen los agentes de la ley, vamos mal.
Total, que es de lo más mediocre (y aburrido, claro, aunque eso es normal)... pero si eres un completista del subgénero como yo, ¡te toca pringar!.
domingo, 31 de julio de 2011
sábado, 30 de julio de 2011
EQUINOX
Lean atentamente: Un grupo de jovenzuelos se dirigen a una cabaña en el bosque, habitada por un profesor que está traduciendo un antiguo libro. Al leerlo, se abre un pasaje al infierno, por el que comienzan a salir extrañas criaturas y entes que van poseyendo a los muchachos. Les suena, ¿verdad?. Pero no, no estoy hablando de esa masterpiece titulada "Posesión Infernal", estoy hablando de "Equinox", curioso film rodado más de diez años antes que el clásico de Sam Raimi. Y es que "Equinox" no solo se ha convertido en un cult-film por ese motivo, también por otros muchos igualmente jugosos.
Originalmente lo rodó el año 1967 como mediometraje estudiantil un ambicioso/joven Dennis Muren, devoto del fantástico y el stop-motion que acabaría currando en títulos de tanta solera como "La guerra de las galaxias", "Encuentros en la tercera fase", "El retorno del Jedi", "Terminator 2" o la reciente "Super 8" y ganando algunos Oscars. Ahí es nada. Para la ocasión, contó con otros colegas suyos que, como él, con el paso de los años tendrían mucho que aportar al cine en cuanto a efectos especiales se refiere: Dave Allen (habitual de los productos "Empire") y Jim Danforth ("Furia de Titanes", "La Cosa", "En los límites de la realidad", "El día de los muertos", "Commando" o "El príncipe de las tinieblas"). Encima, como asistente de cámara nos topamos con Ed Begley Jr., el reconocible actor rubio que acompañaba a Jeff Goldblum en "Transylvania 6-5000".
Total, que dadas las circunstancias, y el bajo presupuesto, "Equinox" no quedó ni tan mal. Tanto es así que fue adquirida por una compañía para su comercialización (y actualmente luce en un lujoso dvd de "Criterion", sello especializado en pelis de "cualité" y arte y ensayo!!!!). El problema estaba en la duración, así que contrataron a un habitual técnico de efectos de sonido (también con lustroso curriculum), de nombre Jack Woods, quien se encargó de rodar y, ya de paso, protagonizar material nuevo. La chungo es que, finalmente, la peli se estrenó en 1970 y Woods figuraba como único director, relegando a Dennis Muren a funciones de productor y efectos especiales. Por cierto, su distribuidor no fue otro que Jack H. Harris, famoso por producir el original "The Blob". "Equinox" es en esencia un producto totalmente amateur y casero. Los efectos especiales, a base de criaturas animadas mediante stop-motion, son crudos y sangrantemente artesanos, lo que, por otro lado, le confiere mucho encanto. Los actores son bastante malos, y hay unos cuantos suculentos momentos para el cachondeo (sobre todo cuando el jeta de Jack Woods acerca sus morritos al objetivo de la cámara). En cuanto al parecido con "Posesión Infernal" (e incluso "Terroríficamente muertos" y "El ejército de las tinieblas"), se trata de algo totalmente casual según han afirmado Sam Raimi y Tom Sullivan. Y sí, superado el susto inicial de la trama, en realidad guardan muy poco parecido... pero algo hay, incluso ciertas resoluciones visuales o momentos tan reconocibles como cuando los jovenzuelos, sentados en círculo, leen lo que el profesor ha escrito sobre el misterioso libro. O la secuencia en la que una de las chicas es poseída y ataca a otra, con la imposibilidad de detenerla por parte de uno de los mozos. Claro que "Posesión Infernal" no es la única... también el "Phantasma" de Don Coscarelli guarda cierto parecido, sobre todo en el momento en que los chavales encuentran una entrada a otra dimensión -descubierta alargando el brazo que desaparece en la nada-, una dimensión filmada con filtro rojo y que nos muestra a un grupo de monjes encapuchados andando por parajes desérticos. ¿Suena, eh?.
Sin embargo, dejando de lado parecidos, nombres famosos, amateurismo y cultos varios, hay que reconocer que "Equinox" es, como dicen en la misma peli, "heavy stuff"... traducido en los subtítulos como "Un coñazo".
Originalmente lo rodó el año 1967 como mediometraje estudiantil un ambicioso/joven Dennis Muren, devoto del fantástico y el stop-motion que acabaría currando en títulos de tanta solera como "La guerra de las galaxias", "Encuentros en la tercera fase", "El retorno del Jedi", "Terminator 2" o la reciente "Super 8" y ganando algunos Oscars. Ahí es nada. Para la ocasión, contó con otros colegas suyos que, como él, con el paso de los años tendrían mucho que aportar al cine en cuanto a efectos especiales se refiere: Dave Allen (habitual de los productos "Empire") y Jim Danforth ("Furia de Titanes", "La Cosa", "En los límites de la realidad", "El día de los muertos", "Commando" o "El príncipe de las tinieblas"). Encima, como asistente de cámara nos topamos con Ed Begley Jr., el reconocible actor rubio que acompañaba a Jeff Goldblum en "Transylvania 6-5000".
Total, que dadas las circunstancias, y el bajo presupuesto, "Equinox" no quedó ni tan mal. Tanto es así que fue adquirida por una compañía para su comercialización (y actualmente luce en un lujoso dvd de "Criterion", sello especializado en pelis de "cualité" y arte y ensayo!!!!). El problema estaba en la duración, así que contrataron a un habitual técnico de efectos de sonido (también con lustroso curriculum), de nombre Jack Woods, quien se encargó de rodar y, ya de paso, protagonizar material nuevo. La chungo es que, finalmente, la peli se estrenó en 1970 y Woods figuraba como único director, relegando a Dennis Muren a funciones de productor y efectos especiales. Por cierto, su distribuidor no fue otro que Jack H. Harris, famoso por producir el original "The Blob". "Equinox" es en esencia un producto totalmente amateur y casero. Los efectos especiales, a base de criaturas animadas mediante stop-motion, son crudos y sangrantemente artesanos, lo que, por otro lado, le confiere mucho encanto. Los actores son bastante malos, y hay unos cuantos suculentos momentos para el cachondeo (sobre todo cuando el jeta de Jack Woods acerca sus morritos al objetivo de la cámara). En cuanto al parecido con "Posesión Infernal" (e incluso "Terroríficamente muertos" y "El ejército de las tinieblas"), se trata de algo totalmente casual según han afirmado Sam Raimi y Tom Sullivan. Y sí, superado el susto inicial de la trama, en realidad guardan muy poco parecido... pero algo hay, incluso ciertas resoluciones visuales o momentos tan reconocibles como cuando los jovenzuelos, sentados en círculo, leen lo que el profesor ha escrito sobre el misterioso libro. O la secuencia en la que una de las chicas es poseída y ataca a otra, con la imposibilidad de detenerla por parte de uno de los mozos. Claro que "Posesión Infernal" no es la única... también el "Phantasma" de Don Coscarelli guarda cierto parecido, sobre todo en el momento en que los chavales encuentran una entrada a otra dimensión -descubierta alargando el brazo que desaparece en la nada-, una dimensión filmada con filtro rojo y que nos muestra a un grupo de monjes encapuchados andando por parajes desérticos. ¿Suena, eh?.
Sin embargo, dejando de lado parecidos, nombres famosos, amateurismo y cultos varios, hay que reconocer que "Equinox" es, como dicen en la misma peli, "heavy stuff"... traducido en los subtítulos como "Un coñazo".
viernes, 29 de julio de 2011
TUCKER Y DALE CONTRA EL MAL
Esta peli triunfó bastante en el pasado Festival de Sitges, muchos me la recomendaron y desde entonces que estaba deseando verla. En esencia se trata de una comedia, una de enredos, en la que se parodia y homenajea al "slasher" campestre pero, sobre todo, al cine de supervivencia (y ambos son subgéneros que adoro). Por eso no ha de extrañarnos, ni atemorizarnos, que de entrada nos topemos con un grupo de universitarios metidos en un coche dispuestos a pasar un grato fin de semana entre la naturaleza. La novedad es que, paralelamente, vemos como un par de paletos montañeses hacen exactamente lo mismo. La gracia aquí es que cuando interactuan, las cosas comienzan a ponerse feas a base de absurdos pero ingeniosos mal entendidos. Donde todo son buenas intenciones y genuina inocencia por parte de los paletos, los universitarios lo toman como acciones hostiles... hasta el extremo de estar convencidos que quieren matarlos y devorarlos. Bien, este es sin duda el mejor punto de "Tucker and Dale vs. Evil", porque en su convicción, los jóvenes no pararán de morir en absurdos accidentes auto-inducidos. Les pongo un divertido ejemplo: Un paleto se curra un tronco con su sierra mecánica. Resulta que dentro hay un panal de abejas, estas salen y le atacan. Histérico, el tipo comienza a correr blandiendo la sierra. Un estudiante lo presencia y, convencido que va a por él, huye aterrorizado... tanto que, en fin, termina atravesado por una rama. Ello provoca que los amigos del muerto crean que ha sido asesinado, lo que complica aún más las cosas... y así buena parte de la peli.
Hasta ahí todo bien... muy bien, el problema viene cuando, obviamente, el director intenta contarnos una historia y desarrolla los acontecimientos de tal modo que estos se vuelven demasiado racionales y pierden su "punch". La parte final es demasiado standard, demasiado "mainstream", narrativamente hablando al menos, y ahí el espíritu gamberro del que la peli ha hecho gala durante un buen rato se evapora por completo.
Pero no hagan mucho caso de mis quisquillosas observaciones, como entretenimiento tontorrón, sano y funcional, "Tucker and Dale vs. Evil" funciona.
Hasta ahí todo bien... muy bien, el problema viene cuando, obviamente, el director intenta contarnos una historia y desarrolla los acontecimientos de tal modo que estos se vuelven demasiado racionales y pierden su "punch". La parte final es demasiado standard, demasiado "mainstream", narrativamente hablando al menos, y ahí el espíritu gamberro del que la peli ha hecho gala durante un buen rato se evapora por completo.
Pero no hagan mucho caso de mis quisquillosas observaciones, como entretenimiento tontorrón, sano y funcional, "Tucker and Dale vs. Evil" funciona.
jueves, 28 de julio de 2011
SUFRIMIENTO DE UN PADRE
Lo mío con este tipo de productos es de juzgado de guardia. Siento absoluta debilidad por las películas andinas. Me quedo embobado ante tanta pobreza, y a la vez, tantas ganas de hacer cosas. A poco que indaguemos, nos daremos cuenta de que Perú es un filón a explotar, el sumun del cine del tercer mundo. Olvídense de la mierda del Bollywood e incluso del Nollywood Nigeriano, en el cual me quiero sumergir en cuanto pueda. Los peruanos de montaña, con todas sus limitaciones, tanto técnicas como físicas e incluso intelectuales, son genuinos y auténticos.
Tocan todos los palos, pero en el género que son absolutos maestros, es el drama. También es mi género Peruano favorito.
Bien, pues hay una especie de saga no oficial, en la que miembros de una familia sufren mucho. Cada película lleva la palabra “Sufrimiento” en el título. Las iré reseñando regularmente por aquí.
SUFRIMIENTO DE UN PADRE, cuenta la historia de un hombre que para sacar adelante a su familia tiene que pluriemplearse en los más mugrientos trabajos. Trabajos estos en los que, además, por ser un poco zoquete, le engañan. ¿Qué se dedica a limpiar botas? Pues no le pagan. ¿Qué empuja un carro? Le dejan tirado.
Para colmo de males, como esposa tiene una malvada mujer a la que lo único que le interesa es el dinero (vamos, como a todas las esposas…) y que siempre le parece poco lo que su marido trae a casa. Tiene un hijo contestón y mal educado que niega a su padre y además no estudia y va para delincuente. Y una hija que se ha quedado embarazada y no quiere abortar, porque piensa que se puede morir en el proceso. Con todo esto debe lidiar nuestro sufrido protagonista, hasta que las cosas se tornan catastróficas y todos se dan cuenta de lo mucho que sufría ese hombre… cuando ya es demasiado tarde.
Vamos, como JUANITO EL HUERFANITO, pero en mayor.
Mini-DV en ristre, programas de edición básicos para P.C´s, y el viento y la mala dicción impidiendo que podamos escuchar los diálogos ¡Qué maravilla!
Tosca, brusca, mal rodada y montada como si fuese un vídeo de boda, la baza fuerte la tienen los actores, gente rural con afición en realidad, a los cuales no hay manera de comprender una sola palabra de lo que dicen. Y no, no están hablando jerga o dialecto alguno. Lo mejor de todo es que, a pesar de este desastre, consigo ver la película sin darle ni una vez al avance rápido, porque como yo esperaba (y contra todos los pronósticos de ustedes), ¡está entretenida de cojones!
Rodada en Ayacucho, una de las regiones andinas más cinéfilas de todo el Perú, y lugar del que salen algunos de los videoastas más famosos de los Andes, como este Elmer Joselito Mejía Tantalean, que es también el director de LAGRIMAS Y CARCAJADAS.
Una obra maestra.
Y por supuesto, no puedo dejar de hablar del cartel, no ya por la expresión de los actores, si no por el “Todo vale” imperante en la carátula: Para empezar, el mercado del DVD andino es piratón, funciona a base de dvd-r y fotocopia en color, vendiendo en mercadillos y paradas en las esquinas. Como el Top manta, pero con producto exclusivo. Eso no les impide -observen la carátula- asegurar que la película se rodó en alta definición, que la distribuye nada mas y nada menos que Metro Goldwyn Mayer, y que el disco es DVD, pero también Blu Ray (¿??), cuando la verdad es que la calidad de la imagen es pésima, cercana a lo inmundo, que no tiene distribuidora alguna (ni sale en imdb), y que obviamente, no es Blu Ray. Vaya manera de mentir a los posibles compradores. Aunque yo, siendo tan listo y sin caer en el engaño, la compraría al precio que fuese…
Tocan todos los palos, pero en el género que son absolutos maestros, es el drama. También es mi género Peruano favorito.
Bien, pues hay una especie de saga no oficial, en la que miembros de una familia sufren mucho. Cada película lleva la palabra “Sufrimiento” en el título. Las iré reseñando regularmente por aquí.
SUFRIMIENTO DE UN PADRE, cuenta la historia de un hombre que para sacar adelante a su familia tiene que pluriemplearse en los más mugrientos trabajos. Trabajos estos en los que, además, por ser un poco zoquete, le engañan. ¿Qué se dedica a limpiar botas? Pues no le pagan. ¿Qué empuja un carro? Le dejan tirado.
Para colmo de males, como esposa tiene una malvada mujer a la que lo único que le interesa es el dinero (vamos, como a todas las esposas…) y que siempre le parece poco lo que su marido trae a casa. Tiene un hijo contestón y mal educado que niega a su padre y además no estudia y va para delincuente. Y una hija que se ha quedado embarazada y no quiere abortar, porque piensa que se puede morir en el proceso. Con todo esto debe lidiar nuestro sufrido protagonista, hasta que las cosas se tornan catastróficas y todos se dan cuenta de lo mucho que sufría ese hombre… cuando ya es demasiado tarde.
Vamos, como JUANITO EL HUERFANITO, pero en mayor.
Mini-DV en ristre, programas de edición básicos para P.C´s, y el viento y la mala dicción impidiendo que podamos escuchar los diálogos ¡Qué maravilla!
Tosca, brusca, mal rodada y montada como si fuese un vídeo de boda, la baza fuerte la tienen los actores, gente rural con afición en realidad, a los cuales no hay manera de comprender una sola palabra de lo que dicen. Y no, no están hablando jerga o dialecto alguno. Lo mejor de todo es que, a pesar de este desastre, consigo ver la película sin darle ni una vez al avance rápido, porque como yo esperaba (y contra todos los pronósticos de ustedes), ¡está entretenida de cojones!
Rodada en Ayacucho, una de las regiones andinas más cinéfilas de todo el Perú, y lugar del que salen algunos de los videoastas más famosos de los Andes, como este Elmer Joselito Mejía Tantalean, que es también el director de LAGRIMAS Y CARCAJADAS.
Una obra maestra.
Y por supuesto, no puedo dejar de hablar del cartel, no ya por la expresión de los actores, si no por el “Todo vale” imperante en la carátula: Para empezar, el mercado del DVD andino es piratón, funciona a base de dvd-r y fotocopia en color, vendiendo en mercadillos y paradas en las esquinas. Como el Top manta, pero con producto exclusivo. Eso no les impide -observen la carátula- asegurar que la película se rodó en alta definición, que la distribuye nada mas y nada menos que Metro Goldwyn Mayer, y que el disco es DVD, pero también Blu Ray (¿??), cuando la verdad es que la calidad de la imagen es pésima, cercana a lo inmundo, que no tiene distribuidora alguna (ni sale en imdb), y que obviamente, no es Blu Ray. Vaya manera de mentir a los posibles compradores. Aunque yo, siendo tan listo y sin caer en el engaño, la compraría al precio que fuese…
BEHEMOTH
No me pregunten el motivo, pero realmente tenía ganas de hincarle el diente a esta "Behemoth". Que sí, que se trata del típico telefilm emitido por el "SyFy Channel" cargado de tópicos, diálogos tontos, efectos CGI mediocres y... en fin, lo de siempre. Pero en esta ocasión había "algo" que lo convertía en atractivo para mi. Puede que fuera su ambientación montañil, puede que su temática apocalíptica o la prometedora idea de su sinopsis: un mega-monstruo gigante de origen desconocido que despierta dentro de una montaña para acabar con la humanidad. Reconozcan que es llamativa.
Total, que la vi ayer noche, con toda la buena voluntad del mundo. Y sí, la historia no dista mucho de lo que les contaba arriba. Una montaña, y el pueblecito que tiene a sus pies, comienzan a sufrir tembleques y fenómenos naturales "normales" pero atípicos para la zona. Una científica la mar de guapa (yes!), que encima es la ex del prota (yes!), un fornido y guapo leñador (yes!), llega al pueblo dispuesta a descubrir el misterio. Y arreglar la situación si es posible.
Puesss, ¿qué quieren que les diga, amigos?, no hay muchas sorpresas en "Behemoth". El arranque está bastante majo, pero a medida que nos adentramos en la historia, esta va perdiendo fuelle. No mola que se trate de una criatura tan apocalíptica con intenciones tan amplias (cargarse la civilización entera), y surja en un remoto paraje de los USA para ser combatida -y vencida- por cuatro pelagatos, que encima son familia. Una peli así demandaba imágenes mucho más espectaculares... digamos que sus intenciones y sus resultados están descompensados... pero claro, ¡¿qué esperaba?!.
Los efectos infográficos en general son chusqueros, pero hay que reconocer que el monstruo está bastante bien hecho cuando aparece de cuerpo entero.
En fin, no se... se puede ver... entretiene por los pelos... está entre lo más soportable del catálogo SyFy... pero tampoco es para tirar cohetes. Destinada a devotos y pacientes, básicamente.
Total, que la vi ayer noche, con toda la buena voluntad del mundo. Y sí, la historia no dista mucho de lo que les contaba arriba. Una montaña, y el pueblecito que tiene a sus pies, comienzan a sufrir tembleques y fenómenos naturales "normales" pero atípicos para la zona. Una científica la mar de guapa (yes!), que encima es la ex del prota (yes!), un fornido y guapo leñador (yes!), llega al pueblo dispuesta a descubrir el misterio. Y arreglar la situación si es posible.
Puesss, ¿qué quieren que les diga, amigos?, no hay muchas sorpresas en "Behemoth". El arranque está bastante majo, pero a medida que nos adentramos en la historia, esta va perdiendo fuelle. No mola que se trate de una criatura tan apocalíptica con intenciones tan amplias (cargarse la civilización entera), y surja en un remoto paraje de los USA para ser combatida -y vencida- por cuatro pelagatos, que encima son familia. Una peli así demandaba imágenes mucho más espectaculares... digamos que sus intenciones y sus resultados están descompensados... pero claro, ¡¿qué esperaba?!.
Los efectos infográficos en general son chusqueros, pero hay que reconocer que el monstruo está bastante bien hecho cuando aparece de cuerpo entero.
En fin, no se... se puede ver... entretiene por los pelos... está entre lo más soportable del catálogo SyFy... pero tampoco es para tirar cohetes. Destinada a devotos y pacientes, básicamente.
miércoles, 27 de julio de 2011
PRIMITIF
Primera película del director procedente de Indonesia Sisworo Gautama Putra (En AVT, vemos películas suyas, mas que por la naturaleza de las pelis, que también, por su exótico nombre. ¡Pronunciarlo, es llenar tu boca de jarabe de frambuesa fresquito!), que, como no, se aprovecha del éxito de todas aquellas pelis de caníbales Italianas, que tan bien funcionaron en la época, siendo ¡MUNDO CANIBAL! ¡MUNDO SALVAJE! el principal título del que Gautama Putra mama.
El argumento, es mas que sencillo: Una serie de antropólogos, naufragan en algún lugar de la selva, con tan mala suerte que topan, no solo con una tribu de caníbales cuyas intenciones son comérselos, si no también con los peligros típicos de la selva: los animales salvajes y el espeso follaje.
A pesar del exotismo de su procedencia (¿Una película de caníbales Indonesa? Pensaba que no estaría preparado para tanto elemento anti-natura…), la puñetera película no pasa de mala, y ya está. Si, tira de mucha imagen de archivo, hay peleas entre animales selváticos sacadas directamente de documentales, y es bastante curioso el uso que hace de la cámara el señor Gautama Putra, al que le gusta deformar las imágenes con el fin de retratar el efecto lisérgico que provoca una planta venenosa tras ser ingerida por uno de los antropólogos (Un tío con pinta de hawaiiano, con gafitas redondas y melenas rizadas, que parece sacado de cualquier tribu, antes que de la universidad), pero ni por esas, merece la pena este pedazo de pestiño.
Los caníbales, efectivamente, y no se si vino antes el título o la película, mas que caníbales, parecen hombres de las cavernas, y, puesto que casi no se comen a nadie (los tres protagonistas salen ilesos de su aventura), al menos, si que hacen jirones a la ropa de sus víctimas a la perfección, e incluso hay alguno que prefiere restregarse, cual perrillo, por la pierna de su víctima en lugar de alimentarse.
Como no, la producción se carga un par de animalillos, para no ser menos (y tan sin vergüenzas, tan cabrones) que los italianos, y hay mucha lombriz asquerosa por ahí suelta, pero ni de coña, llegan a las cotas de repugnancia de las películas de caníbales originales, no teniendo ni la mitad de gore, y sobre todo, la mitad de mala leche.
Así pues, los amantes del sub- género, pueden pensar: “Ya que no vamos a ver una peli buena de caníbales, podremos reírnos de su pobreza, falta de medios, y condición exótica…”, pues ni de coña. PRIMITIF, no llega ni a ridícula. Es más, si quieres ver delirio hecho película de caníbales, es infinitamente mejor el TERROR CANIBAL de Julio Perez Tabernero, en la que para empezar, los caníbales, son interpretados por gitanos.
O sea, que lo único positivo que le veo a esta película, es el poder decir el nombre del director: “Que mala es PRIMITIF de Siworo Gautama Putra”. Menos es nada.
Por cierto, Naxo ya comentó algo acerca de esta mierda aquí mismo.
El argumento, es mas que sencillo: Una serie de antropólogos, naufragan en algún lugar de la selva, con tan mala suerte que topan, no solo con una tribu de caníbales cuyas intenciones son comérselos, si no también con los peligros típicos de la selva: los animales salvajes y el espeso follaje.
A pesar del exotismo de su procedencia (¿Una película de caníbales Indonesa? Pensaba que no estaría preparado para tanto elemento anti-natura…), la puñetera película no pasa de mala, y ya está. Si, tira de mucha imagen de archivo, hay peleas entre animales selváticos sacadas directamente de documentales, y es bastante curioso el uso que hace de la cámara el señor Gautama Putra, al que le gusta deformar las imágenes con el fin de retratar el efecto lisérgico que provoca una planta venenosa tras ser ingerida por uno de los antropólogos (Un tío con pinta de hawaiiano, con gafitas redondas y melenas rizadas, que parece sacado de cualquier tribu, antes que de la universidad), pero ni por esas, merece la pena este pedazo de pestiño.
Los caníbales, efectivamente, y no se si vino antes el título o la película, mas que caníbales, parecen hombres de las cavernas, y, puesto que casi no se comen a nadie (los tres protagonistas salen ilesos de su aventura), al menos, si que hacen jirones a la ropa de sus víctimas a la perfección, e incluso hay alguno que prefiere restregarse, cual perrillo, por la pierna de su víctima en lugar de alimentarse.
Como no, la producción se carga un par de animalillos, para no ser menos (y tan sin vergüenzas, tan cabrones) que los italianos, y hay mucha lombriz asquerosa por ahí suelta, pero ni de coña, llegan a las cotas de repugnancia de las películas de caníbales originales, no teniendo ni la mitad de gore, y sobre todo, la mitad de mala leche.
Así pues, los amantes del sub- género, pueden pensar: “Ya que no vamos a ver una peli buena de caníbales, podremos reírnos de su pobreza, falta de medios, y condición exótica…”, pues ni de coña. PRIMITIF, no llega ni a ridícula. Es más, si quieres ver delirio hecho película de caníbales, es infinitamente mejor el TERROR CANIBAL de Julio Perez Tabernero, en la que para empezar, los caníbales, son interpretados por gitanos.
O sea, que lo único positivo que le veo a esta película, es el poder decir el nombre del director: “Que mala es PRIMITIF de Siworo Gautama Putra”. Menos es nada.
Por cierto, Naxo ya comentó algo acerca de esta mierda aquí mismo.
STAR TREK (2009)
No soy fan de Star Trek, ni de las series ni de las películas. Vi la primera hace muchos años, luego creo que fue la segunda y para terminar una de unas ballenas espaciales. Solo guardo pequeños destellos de escenas y planos en mi memoria, vamos que Star Trek nunca me hizo mucha gracia y es mas, me resultaba aburrida. Para películas de ciencia ficción espacial prefiero Star Wars y para serie Stargate, sera que soy un simple y que me gusta la acción, sera que no comprendo la magnificencia de Star Trek y su colorido universo, sera que Spock se me hacia cansino y Kirk un chuloputas. Fuera por lo que fuera, Star Trek no me provocaba curiosidad, y cuando se estreno este remake/nueva versión, ni me moleste en prestarle atención. Si, sabia que era un nuevo reinicio y que estaba J.J. Abrahams dirigiendo el cotarro, incluso que salia Simon Pegg, un actor que me cae muy simpático, y también el malo de la serie Héroes (Zachary Quinto) pero como que no, que no le tenia ni las mas mínimas ganas. Este fin de semana me la puse esperando mas bien poco y la verdad es que me ha entretenido y me lo he pasado bastante bien viéndola, no tan bien (o tan mal, que nunca se sabe) como lo pasarían los fans pillando referencias y coñitas de pelis y episodios de series anteriores, pero lo suficientemente bien como para que cuando hagan la segunda parte me plantee verla en cine.
Arranca la aventura con la llegada de Nero, el malo malisimo de esta entrega y como su obsesión por acabar con Spock provoca la muerte del padre del Capitán Kirk y de toda la tripulación que no había evacuado la nave. Damos un salto en el tiempo hasta el dia que Kirk se enrola en las fuerzas armadas (no recuerdo el nombre y sinceramente, da igual ¿Mando espacial? bah, lo que sea) ya vemos que Kirk es un creído de si mismo, ligón y fanfarrón, el medico, es amigo suyo (no recuerdo el nombre, dilapidadme trekkies) Kirk se quiere ligar a la negra (de la que Kirk no sabe el nombre y yo no lo recuerdo) pero esta pasa de el. Damos otro salto en el tiempo, ahora solo de 3 años. Ya están licenciados, pero Kirk es la oveja negra del Enterprise y Spock no le traga. Nero vuelve a aparecer, se ha tirado 26 años haciendo sudokus o algo, ah no que estaba buscando Vulcano. Vale, lo encuentra y lo destruye con una gotita de liquido rojo que meten en el núcleo del planeta. Todo Vulcano a tomar por culo, y con el planeta, la madre de Spock. Ahora esto es personal, piensa Spock, aunque para Kirk ya lo era desde el mismo día que nació.
Por cosas del destino Kirk acaba cogiendo el mando de la nave, y aunque las ordenes del anterior capitán son volver con el resto de las fuerzas espaciales (o como se llamen) Kirk se la pasa por el forro y decide ir a rescatar a su capitán, aunque para ello tenga que teletransportarse dentro de la nave enemiga.
No se que opinaran de esta película los fans de Star Trek, si me tengo que fiar de los comentarios de la serie The Big Bang Theory, entiendo que no les gusto, y como no tengo ningún trekkie a mano no puedo preguntarle. A mi me gusto, me lo pase bien, cierto que hubo un momento en el que se me hizo un pelin lenta, pega un bajón en el momento del cameo importante y aunque debería de pegar subidón, para mi fue lo contrario. Aun así, la película es perfectamente disfrutable, es un buen reinicio, porque al menos el espectador novel en la saga, como es mi caso, no se ha sentido perdido en un mar de nombres, y referencias, y si las hay no molestan.
Si siguen en esta linea, igual me acabo haciendo new trekkie, bueno igual no, pero al menos las veré.
Arranca la aventura con la llegada de Nero, el malo malisimo de esta entrega y como su obsesión por acabar con Spock provoca la muerte del padre del Capitán Kirk y de toda la tripulación que no había evacuado la nave. Damos un salto en el tiempo hasta el dia que Kirk se enrola en las fuerzas armadas (no recuerdo el nombre y sinceramente, da igual ¿Mando espacial? bah, lo que sea) ya vemos que Kirk es un creído de si mismo, ligón y fanfarrón, el medico, es amigo suyo (no recuerdo el nombre, dilapidadme trekkies) Kirk se quiere ligar a la negra (de la que Kirk no sabe el nombre y yo no lo recuerdo) pero esta pasa de el. Damos otro salto en el tiempo, ahora solo de 3 años. Ya están licenciados, pero Kirk es la oveja negra del Enterprise y Spock no le traga. Nero vuelve a aparecer, se ha tirado 26 años haciendo sudokus o algo, ah no que estaba buscando Vulcano. Vale, lo encuentra y lo destruye con una gotita de liquido rojo que meten en el núcleo del planeta. Todo Vulcano a tomar por culo, y con el planeta, la madre de Spock. Ahora esto es personal, piensa Spock, aunque para Kirk ya lo era desde el mismo día que nació.
Por cosas del destino Kirk acaba cogiendo el mando de la nave, y aunque las ordenes del anterior capitán son volver con el resto de las fuerzas espaciales (o como se llamen) Kirk se la pasa por el forro y decide ir a rescatar a su capitán, aunque para ello tenga que teletransportarse dentro de la nave enemiga.
No se que opinaran de esta película los fans de Star Trek, si me tengo que fiar de los comentarios de la serie The Big Bang Theory, entiendo que no les gusto, y como no tengo ningún trekkie a mano no puedo preguntarle. A mi me gusto, me lo pase bien, cierto que hubo un momento en el que se me hizo un pelin lenta, pega un bajón en el momento del cameo importante y aunque debería de pegar subidón, para mi fue lo contrario. Aun así, la película es perfectamente disfrutable, es un buen reinicio, porque al menos el espectador novel en la saga, como es mi caso, no se ha sentido perdido en un mar de nombres, y referencias, y si las hay no molestan.
Si siguen en esta linea, igual me acabo haciendo new trekkie, bueno igual no, pero al menos las veré.
EL DEMONIO DEL DESIERTO
A inicios de los 90, Richard Stanley parecía la gran promesa del nuevo cine fantástico. Había encandilado a muchos -a mi no- con su largometraje de debut "Hardware, programado para matar" y además lucía un aspecto muy peculiar que le daba un "plus" a la imagen de director atípico. Cuando se anunció el rodaje de su segundo largo en 1992, "Dust Devil" ("El demonio del desierto" en paletolandia), todos se frotaban las manos convencidos de que automáticamente sería un nuevo clásico del fantástico. Sin embargo, al poco de terminarse, la peli entró en una espiral de problemas, desde su remontaje en manos de los temibles hermanos Weinstein (los de "Miramax") a las dificultades para su estreno. Total, que prácticamente no tuvo difusión y pronto, la curiosidad y el interés se diluyeron. Finalmente, y tras mucho deambular, Richard Stanley logró hacerse con el negativo y realizar su versión, "The final cut". Esa es la que, por fin, vi ayer noche.
La peli nos cuenta la historia de un especie de demonio enviado del mal cuya misión es acabar con la vida de aquellos que, inconscientemente, lo reclaman... personas perdidas, solas o, directamente, suicidas. La chica prota es una de esas. Pronto, se cruzará con el demonio en cuestión, nacerá una historia de amor y, llegado su momento, las cosas se pondrán feas cuando el muchacho intente cumplir con su cometido. De por medio hay un policía que investiga el caso pero, sinceramente, tampoco aporta mucho... de hecho, fue una de las partes extirpadas en el remontaje de los Weinstein y, oye, ni tan mal.
"Dust Devil" se anunció en su momento como una mezcla de spaguetti western y peli de terror con ciertas gotas del cine de Alejandro Jodorowsky (concretamente de "El Topo"), algo que le pegaba mucho al amigo Stanley, al que le tira el misticismo y todas esas cosas tan jipis. Y sí, la peli a nivel visual es la leche, tiene momentos realmente bonitos y llamativos, en ese sentido el empaque es excelente y el director logra crear una potente atmósfera que nos mantiene en vilo mirando a la pantalla. El problema es que, al mismo tiempo, pretende contarnos una historia... y aquí es donde descubrimos el punto débil de "Dust Devil" (y de Richard Stanley), ya que esta resulta, además de típica en su fondo, algo plomiza. Así, la peli se desenvuelve muy bien en su primera hora, para volverse algo plasta en la parte final. En realidad nada nuevo, en los 90 era muy habitual encontrarse con directores de video-clips que, al pasar al largometraje, denotaban mucho talento para el envoltorio, pero poco interés (y poca capacidad) de cara al contenido. Stanley era uno de esos.
Está claro que la fama de maldita de "Dust Devil" ayuda a su mitificación... pero, siendo prácticos, no hay para tanto.
La peli nos cuenta la historia de un especie de demonio enviado del mal cuya misión es acabar con la vida de aquellos que, inconscientemente, lo reclaman... personas perdidas, solas o, directamente, suicidas. La chica prota es una de esas. Pronto, se cruzará con el demonio en cuestión, nacerá una historia de amor y, llegado su momento, las cosas se pondrán feas cuando el muchacho intente cumplir con su cometido. De por medio hay un policía que investiga el caso pero, sinceramente, tampoco aporta mucho... de hecho, fue una de las partes extirpadas en el remontaje de los Weinstein y, oye, ni tan mal.
"Dust Devil" se anunció en su momento como una mezcla de spaguetti western y peli de terror con ciertas gotas del cine de Alejandro Jodorowsky (concretamente de "El Topo"), algo que le pegaba mucho al amigo Stanley, al que le tira el misticismo y todas esas cosas tan jipis. Y sí, la peli a nivel visual es la leche, tiene momentos realmente bonitos y llamativos, en ese sentido el empaque es excelente y el director logra crear una potente atmósfera que nos mantiene en vilo mirando a la pantalla. El problema es que, al mismo tiempo, pretende contarnos una historia... y aquí es donde descubrimos el punto débil de "Dust Devil" (y de Richard Stanley), ya que esta resulta, además de típica en su fondo, algo plomiza. Así, la peli se desenvuelve muy bien en su primera hora, para volverse algo plasta en la parte final. En realidad nada nuevo, en los 90 era muy habitual encontrarse con directores de video-clips que, al pasar al largometraje, denotaban mucho talento para el envoltorio, pero poco interés (y poca capacidad) de cara al contenido. Stanley era uno de esos.
Está claro que la fama de maldita de "Dust Devil" ayuda a su mitificación... pero, siendo prácticos, no hay para tanto.
martes, 26 de julio de 2011
QUARANTINE 2: TERMINAL
Dentro de unos años, miraremos hacia atrás y fliparemos recordando el desmedido zombie-boom que sufrimos a nivel planetario. Ahora la cosa comienza a perder fuelle (¡¡ya era hora!!), aunque incluso se habla de una peli nueva sobre el tema con Brad Pitt (ugh!), pero no hace tanto era una auténtica demencia... centenares de pelis, millares de libros (¿cuántas guías definitivas se han publicado ya?), merchandising, Zombie Walks, serie de tv... DE TODO!!! y DEmasiado. Es lo que tienen las putas modas, que todo puto dios se apunta a ellas sin plantearse nada. Supongo que, como seres humanos que somos -e idiotas-, nos gusta sentirnos parte de algo, digo yo. Total, que dentro de esta fiebre uno de los títulos más notorios fue la -a mi gusto, mediocre- producción hispana "REC". Su éxito, propició un remake desde los USA titulado "Quarantine", que sí, NO era una copia (era un remake LEGAL... en todo caso los copiones fueron los de "REC") y, también, mejoraba y mucho la española. Poco después hubo un "REC 2" (que aún no he visto, y tampoco es que me apetezca demasiado) seguido de un "Quarantine 2". La diferencia es que, esta vez, no era un remake, vamos, que dejaba de lado el patrón español para buscarse su propio camino. "Quarantine 2: Terminal" se olvida de la estética de falso documental y se ciñe a la narrativa standard de una peli normal.
De entrada parece que vayamos a ver otro remake/versión mejorada, esta vez de la decepcionante "Plane Dead", pero no, el tema avión se limita a los primeros 20 minutos... y es una lástima, porque es lo mejor del pack. En pleno vuelo, se dispara la infección de marras y un tio muy gordo se convierte en zombie. Así que el "parato" se ve obligado a aterrizar en plan emergencia y aquí es donde pasamos la acción al aeropuerto, concretamente a sus tripas, allí donde las maletas recorren grandes distancias sobre una cinta. Y bueno, todo sigue su rutina: los personajes luchan por sobrevivir, se vuelven paranóicos primero, zombies después... aparece el ejército, muy hostil, y bla, bla.
En realidad "Quarantine 2: Terminal" está bien narrada, bien acabada técnicamente, bien interpretada, con sus escuetos momentos de horror/gore... vamos, que se puede ver perfectamente y entretiene lo suficiente, pero claro, su falta de "algo", su abuso de "todo" y lo cansino de sus monstruos protagonistas le otorgan el dudoso honor de ser una peli "fast food", prescindible y olvidable.
Tu mismo.
PD: Apunte gracioso, en los créditos Jaume Balagueró aparece rebautizado como BElegueró!.
De entrada parece que vayamos a ver otro remake/versión mejorada, esta vez de la decepcionante "Plane Dead", pero no, el tema avión se limita a los primeros 20 minutos... y es una lástima, porque es lo mejor del pack. En pleno vuelo, se dispara la infección de marras y un tio muy gordo se convierte en zombie. Así que el "parato" se ve obligado a aterrizar en plan emergencia y aquí es donde pasamos la acción al aeropuerto, concretamente a sus tripas, allí donde las maletas recorren grandes distancias sobre una cinta. Y bueno, todo sigue su rutina: los personajes luchan por sobrevivir, se vuelven paranóicos primero, zombies después... aparece el ejército, muy hostil, y bla, bla.
En realidad "Quarantine 2: Terminal" está bien narrada, bien acabada técnicamente, bien interpretada, con sus escuetos momentos de horror/gore... vamos, que se puede ver perfectamente y entretiene lo suficiente, pero claro, su falta de "algo", su abuso de "todo" y lo cansino de sus monstruos protagonistas le otorgan el dudoso honor de ser una peli "fast food", prescindible y olvidable.
Tu mismo.
PD: Apunte gracioso, en los créditos Jaume Balagueró aparece rebautizado como BElegueró!.
lunes, 25 de julio de 2011
BARRACUDA
Wayne Crawford es un personaje tan curioso como interesante, un actor que cuando ejerce funciones protagónicas, gusta también de aplicarse en otros apartados creativos, tales como guionizar o incluso dirigir, cosa esta que ha hecho en siete ocasiones. Entre sus vehículos para el auto-bombo destacan "Jake Speed, la aventura de África" (peli que me fascinaba de jovenzuelo y que estoy a la espera de recuperar con fines repasativos) y esta "Barracuda", exploit absoluto y descarado del "Tiburón" Spielbergiano surgido cuando más demanda había, 1978. Yo la vi siendo chaval (además, me suena que en pantalla grande), y de ella solo recordaba una escena. Por eso mismo me hizo mucha ilusión localizarla hace un par de días y tenía unas ganas tremebundas de revisarla. Hecho ello, paso a escribir la sarta de tonteridas que siguen...
En un pueblo costero comienzan a aparecer cadáveres de buceadores por todas partes. Resulta que las barracudas, peces en un principio inofensivos para el hombre, se han vuelto tarumbas y atacan a la peña. Un joven biólogo, que es el terror de las nenas, está convencido de que la culpable es una fábrica que contamina el agua. Con ayuda del sheriff, hará todo lo que esté en su mano para poner fin al putiferio.
Bien, una de las supuestas virtudes de "Barracuda" es que los autores eran conscientes de que con sus limitados medios, sería mejor táctica darle un papel secundario a los peces asesinos y centrarse en los personajes humanos y las trifulcas con un implacable gobierno decidido a ocultar sus fallidos experimentos. Así pues, si hasta mitad de peli las barracudas se lucían más bien poco, de ahí al final directamente desaparecen y todo se centra en el lado "conspirativo" de la movida. Lástima que tan loable intento termine convirtiendo al resultado final en bastante plomizo, casi telefílmico. Vamos, que "Barracuda" es un rollito, a pesar de un desenlace tan inesperado como efectivo y chocante, de su simpático regusto setentero, de la famosa secuencia que guardaba en mi memoria desde que la viera de chaval (la moza que encuentra la cabeza decapitada de un buzo, dentro de su traje de inmersión) y, ¡¡ojo al dato!!, la presencia actoral de William Kerwin. ¿De quién?, bueno, es posible que te suene más con su otro nombre de guerra, Thomas Wood, de cuando protagonizaba los delirios sangrientos del mítico Herschell Gordon Lewis, delirios como "Blood Feast", "2000 Maniacos" o "A taste of blood".
Resumiendo, que una penica... "Barracuda" podría haber sido bastante mejor... y se queda en un producto muy regular de esos de ver y olvidar en tiempo récord.
En un pueblo costero comienzan a aparecer cadáveres de buceadores por todas partes. Resulta que las barracudas, peces en un principio inofensivos para el hombre, se han vuelto tarumbas y atacan a la peña. Un joven biólogo, que es el terror de las nenas, está convencido de que la culpable es una fábrica que contamina el agua. Con ayuda del sheriff, hará todo lo que esté en su mano para poner fin al putiferio.
Bien, una de las supuestas virtudes de "Barracuda" es que los autores eran conscientes de que con sus limitados medios, sería mejor táctica darle un papel secundario a los peces asesinos y centrarse en los personajes humanos y las trifulcas con un implacable gobierno decidido a ocultar sus fallidos experimentos. Así pues, si hasta mitad de peli las barracudas se lucían más bien poco, de ahí al final directamente desaparecen y todo se centra en el lado "conspirativo" de la movida. Lástima que tan loable intento termine convirtiendo al resultado final en bastante plomizo, casi telefílmico. Vamos, que "Barracuda" es un rollito, a pesar de un desenlace tan inesperado como efectivo y chocante, de su simpático regusto setentero, de la famosa secuencia que guardaba en mi memoria desde que la viera de chaval (la moza que encuentra la cabeza decapitada de un buzo, dentro de su traje de inmersión) y, ¡¡ojo al dato!!, la presencia actoral de William Kerwin. ¿De quién?, bueno, es posible que te suene más con su otro nombre de guerra, Thomas Wood, de cuando protagonizaba los delirios sangrientos del mítico Herschell Gordon Lewis, delirios como "Blood Feast", "2000 Maniacos" o "A taste of blood".
Resumiendo, que una penica... "Barracuda" podría haber sido bastante mejor... y se queda en un producto muy regular de esos de ver y olvidar en tiempo récord.
domingo, 24 de julio de 2011
PÁNICO EN EL AIRE (TURBULENT SKIES)
Los aviones me producen tanta fascinación como temor, por eso -a menos que tenga un vuelo al día siguiente, cosa nada habitual- me mola ver películas catastróficas en las que estos lo pasan putas. Desafortunadamente, y salvo los puntuales caprichos de don Roland Emmerich, hoy día esa clase de cine directamente es pasto de productos televisivos o video-cluberos. Ello no me impide seguir intentándolo, como hace un par de días, cuando me enfrenté a "Airline Disaster", producto made in Asylum que, en fin, ni siquiera pude terminar (¡dolorrrr!). Aún herido, pero con más moral que el Alcoyano, 24 horas después lo intento de nuevo, esta vez la cosa se titula "Turbulent Skies", un telefilm en toda regla que aunque tiene pinta de haberse hecho en los 90... en realidad está fechado en el 2010. Sorprendente.
Su director no es otro que Fred Olen Ray, antaño ídolo del que suscribe, dedicado hoy día a parir toda clase de insulsos productos usando siempre la misma tramposa táctica: pilla las secuencias más espectaculares de varias películas de gran presupuesto, recórtalas y, a su alrededor, teje otra trama, parida con otro reparto y, claro está, mucho menos dinero. Vale, Olen Ray nunca ha sido un gran director... pero por lo menos su primera época iba plagada de films muy característicos y reconocibles. Lo que hace ahora podría dirigirlo cualquier mindundi y nos quedábamos igual. Una pena.
La cosa va de un avión al que han integrado un nuevo sistema computerizado de pilotaje. Organizan un vuelo de demostración con personal a bordo y... claro, las cosas comienzan a complicarse cuando un virus infecta al ordenador central. Resulta imposible arreglarlo desde dentro, así que el guapo y voluntarioso (y padre) informático que lo creó tendrá que saltar desde un avión militar (que te lo pintan como hiper-peligroso, para luego ver como el tipo lo hace en un pis pas y sin mayor dificultad), desconectarlo y, ya que estamos, aterrizar.
El maromo en cuestión no es otro que Casper Van Dien, por el que confieso que siento una notable simpatía. Le sigue muy de cerca Patrick Muldoon, quien ya le acompañó en el reparto de "Starship Troopers". A la moza le pone rostro y -un fondón, aunque no lo digo como algo malo- cuerpo Nicole Eggert, ex- vigilanta de la playa. Y así en plan secundario de qualité está Brad Dourif. El material robado pertenece a "El fugitivo" y a "Decisión Crítica". De esta última es de la que sacan más tajada. Puede que haya alguna más (¿¿"Turbulence"??), pero se me escapa. Al final, el único efecto especial propio es el de un motor de avión estallando y... en fin, resulta bastante costroso. CGI del peor.
Total, no es tan horripilante como para evitarla (cosa que sí es "Airline Disaster"), pero si te duermes en el proceso, o antes de que empiece, tampoco te pierdes nada.
Su director no es otro que Fred Olen Ray, antaño ídolo del que suscribe, dedicado hoy día a parir toda clase de insulsos productos usando siempre la misma tramposa táctica: pilla las secuencias más espectaculares de varias películas de gran presupuesto, recórtalas y, a su alrededor, teje otra trama, parida con otro reparto y, claro está, mucho menos dinero. Vale, Olen Ray nunca ha sido un gran director... pero por lo menos su primera época iba plagada de films muy característicos y reconocibles. Lo que hace ahora podría dirigirlo cualquier mindundi y nos quedábamos igual. Una pena.
La cosa va de un avión al que han integrado un nuevo sistema computerizado de pilotaje. Organizan un vuelo de demostración con personal a bordo y... claro, las cosas comienzan a complicarse cuando un virus infecta al ordenador central. Resulta imposible arreglarlo desde dentro, así que el guapo y voluntarioso (y padre) informático que lo creó tendrá que saltar desde un avión militar (que te lo pintan como hiper-peligroso, para luego ver como el tipo lo hace en un pis pas y sin mayor dificultad), desconectarlo y, ya que estamos, aterrizar.
El maromo en cuestión no es otro que Casper Van Dien, por el que confieso que siento una notable simpatía. Le sigue muy de cerca Patrick Muldoon, quien ya le acompañó en el reparto de "Starship Troopers". A la moza le pone rostro y -un fondón, aunque no lo digo como algo malo- cuerpo Nicole Eggert, ex- vigilanta de la playa. Y así en plan secundario de qualité está Brad Dourif. El material robado pertenece a "El fugitivo" y a "Decisión Crítica". De esta última es de la que sacan más tajada. Puede que haya alguna más (¿¿"Turbulence"??), pero se me escapa. Al final, el único efecto especial propio es el de un motor de avión estallando y... en fin, resulta bastante costroso. CGI del peor.
Total, no es tan horripilante como para evitarla (cosa que sí es "Airline Disaster"), pero si te duermes en el proceso, o antes de que empiece, tampoco te pierdes nada.
ALICE IN MURDERLAND
Si hay algo que a estas alturas de la vida tengo claro, es que tras un cartel y un título atractivos no tiene por que ocultarse una buena película. Es más, casi por lo general que un poster mole mazo termina resultando mala señal. Aún así, y a pesar de ello, de un modo u otro sigo picando. No es que tras ver el cartel de "Alice in Murderland" creyera sinceramente que estaba ante una prometedora joya, ni mucho menos, pero por unos instantes dejé mi desconfianza a un lado y me dije aquello de "Tal vez...".
Tal vez sea lo que parece, una versión oscura y macabra del famoso relato de "Alicia en el país de las maravillas", situada en neblinosos bosques tétricos y en la que las criaturas originales tengan un look así como monstruoso. Incluso estaba decidido a conformarme con los más mediocres cromas. Pero no, ni por esas. Al final, y tras mucho dudarlo, ayer noche la visioné llevándome la soberana decepción de rigor... desde el segundo número 5 (entre otras cosas porque la peli arranca con un "Basada en hechos reales" que me descolocó).
Así que ni bosques lúgubres, ni monstruos... ni un mínimo de algo. "Alice in Murderland" es un especie de infra-slasher en el que, básicamente, nada ocurre. Además, técnicamente es bastante costrosa, rodada en vídeo maquillado, con un sonido cutre y en general todo como muy rácano. La cosa gira en torno a una chavala, llamada Alice, claro, a la que mataron a su madre cuando aún era una cría. Varios años después, y coincidiendo con su cumple, celebra una fiesta justamente en la misma casa donde ocurrió todo (¡lo normal!). La "coña" es que la fiesta en cuestión es temática, y todos van disfrazados de personajes de "Alicia en el país de las maravillas"... pero ahí acaba el parentesco. Vamos, que es una excusa zafia para meternos hora y media de muuuuuuchos diálogos, pocos asesinatos, efectos especiales muy chusqueros (además muy absurdos, en algunos crímenes la sangre sale a borbotones exageradamente y en otros -como una decapitación- no hay ni gota), un clímax final patatero y, en fin, que la peli termina resultando... ¿cómo decirlo para no ofender a nadie?, ¡horrible!.
Muy evitable.
Tal vez sea lo que parece, una versión oscura y macabra del famoso relato de "Alicia en el país de las maravillas", situada en neblinosos bosques tétricos y en la que las criaturas originales tengan un look así como monstruoso. Incluso estaba decidido a conformarme con los más mediocres cromas. Pero no, ni por esas. Al final, y tras mucho dudarlo, ayer noche la visioné llevándome la soberana decepción de rigor... desde el segundo número 5 (entre otras cosas porque la peli arranca con un "Basada en hechos reales" que me descolocó).
Así que ni bosques lúgubres, ni monstruos... ni un mínimo de algo. "Alice in Murderland" es un especie de infra-slasher en el que, básicamente, nada ocurre. Además, técnicamente es bastante costrosa, rodada en vídeo maquillado, con un sonido cutre y en general todo como muy rácano. La cosa gira en torno a una chavala, llamada Alice, claro, a la que mataron a su madre cuando aún era una cría. Varios años después, y coincidiendo con su cumple, celebra una fiesta justamente en la misma casa donde ocurrió todo (¡lo normal!). La "coña" es que la fiesta en cuestión es temática, y todos van disfrazados de personajes de "Alicia en el país de las maravillas"... pero ahí acaba el parentesco. Vamos, que es una excusa zafia para meternos hora y media de muuuuuuchos diálogos, pocos asesinatos, efectos especiales muy chusqueros (además muy absurdos, en algunos crímenes la sangre sale a borbotones exageradamente y en otros -como una decapitación- no hay ni gota), un clímax final patatero y, en fin, que la peli termina resultando... ¿cómo decirlo para no ofender a nadie?, ¡horrible!.
Muy evitable.
sábado, 23 de julio de 2011
EL CHINO (THE YOUNG MASTER)
Jackie Chan ya era una estrella en su país cuando rodó esta The Young Master, pero hasta ahora sus películas eran principalmente de artes marciales con personajes serios y abnegados por conseguir dominar el Kung Fu. A partir de este momento sus películas y sus personajes giraron mas hacia la comedia china. Aquí el cachondo que traducía los títulos por aquella época decidió llamar a The Young Master, "El chino", con dos cojones. Se quedo calvo el cabrón.
Dos hermanos huérfanos fueron recogidos por un maestro de artes marciales, los cuido, los alimento y les enseño su Kung Fu. En el festival de la región las distintas escuelas compiten en la danza del León, este año la de nuestros protagonistas pierde convirtiéndose en el hazmerreir del pueblo. Dragón (Chan) descubre que su hermano Tigre, ha sido el que ha dirigido el baile de la escuela ganadora pero le encubre y no dice nada. El problema llega cuando su maestro lo descubre, enfadado y decepcionado expulsa a Tigre de la escuela. Este va a pedir trabajo a la escuela rival, allí le echan a la calle, pero le dan un contacto con unos criminales con los que puede ganar dinero en atracos. Dragón sale a buscar a su hermano y como este ya es conocido por la ley lo confunden con el. Las situaciones de enredo se suceden una tras otra, todo ello aderezado de unas buenas coreografías de artes marciales. Aparece Yuen Biao haciendo de hijo del comisario de policía y experto luchador de banqueta y con el tendrá un gag recurrente, Chan se intenta escapar y Biao esta siempre por donde tendría que salir, algo tipo Coyote y Correcaminos a la inversa. Ya empezaba a asomar la afición de Jackie a Harold Lloyd
Es la segunda película que dirige el actor, la versión que nos llego a nuestro país es la que paso por los EEUU, así que dura una hora y media exacta, tiene cortes en el montaje y faltan escenas, por lo que no sabría decir si el ritmo de la película es un acierto de su labor como director, o del que las cortaba para que pudieran entrar en cintas VHS de 90 minutos.
Dos hermanos huérfanos fueron recogidos por un maestro de artes marciales, los cuido, los alimento y les enseño su Kung Fu. En el festival de la región las distintas escuelas compiten en la danza del León, este año la de nuestros protagonistas pierde convirtiéndose en el hazmerreir del pueblo. Dragón (Chan) descubre que su hermano Tigre, ha sido el que ha dirigido el baile de la escuela ganadora pero le encubre y no dice nada. El problema llega cuando su maestro lo descubre, enfadado y decepcionado expulsa a Tigre de la escuela. Este va a pedir trabajo a la escuela rival, allí le echan a la calle, pero le dan un contacto con unos criminales con los que puede ganar dinero en atracos. Dragón sale a buscar a su hermano y como este ya es conocido por la ley lo confunden con el. Las situaciones de enredo se suceden una tras otra, todo ello aderezado de unas buenas coreografías de artes marciales. Aparece Yuen Biao haciendo de hijo del comisario de policía y experto luchador de banqueta y con el tendrá un gag recurrente, Chan se intenta escapar y Biao esta siempre por donde tendría que salir, algo tipo Coyote y Correcaminos a la inversa. Ya empezaba a asomar la afición de Jackie a Harold Lloyd
Es la segunda película que dirige el actor, la versión que nos llego a nuestro país es la que paso por los EEUU, así que dura una hora y media exacta, tiene cortes en el montaje y faltan escenas, por lo que no sabría decir si el ritmo de la película es un acierto de su labor como director, o del que las cortaba para que pudieran entrar en cintas VHS de 90 minutos.
viernes, 22 de julio de 2011
I SPIT ON YOUR GRAVE (2010)
Enésimo remake en plan mainstream, de película salvaje y setentera adscrita al sub-género de “Violación y venganza”, cuya baza fuerte es la crudeza de sus imágenes por culpa de la falta de medios. En este caso, se remakea la famosa LA VIOLENCIA DEL SEXO.
Ya saben, una jovencita, se va a unos bosques de la America profunda a hacer no se qué, cuando unos “Rednecks” la cogen por banda y la violan y apalizan brutalmente. Hasta el Sheriff se apunta al atracón de sadismo. Mas muerta que viva, la joven logra escapar, y tras unos días, vuelve hecha una fiera, para eliminar uno a uno a sus violadores, retrasado mental incluido.
Normalmente, este tipo de remakes, suelen cagarla con el reparto; los violadores, son en exceso guapos. Aquí, no ocurre como en el remake de LA ULTIMA CASA A LA IZQUIERDA, en la que los violadores son poco menos que Top models masculinos, incluso, el que hace de Sheriff, y el retrasado mental, están bastante logrados, pero si es cierto que les falta un poco de sordidez y mala baba a esos rostros. Pero una vez superadas estas cuestiones, y analizando la película globalmente, he de decir, no solo que es una gran película, si no que supera, de largo, la gran bazofia que es la original, eso comparando. Si la tomamos como película independiente, la cosa es mejor aún.
La historia está muy trillada, así que la única forma que tienen los responsables de volver este producto atractivo, es pasándose tres pueblos, y esa es la baza fuerte de la película; que es mas bruta que un arado.
Durante las escenas de violación, tan graficas y despiadadas, el espectador siente desasosiego y mal rollo, porque no se cortan un pelo; Los paletos arrodillan a la chica, y en planos súper largos, le hacen mamar como si fuera una polla, una pistola y una botella. A eso, añádanle la obsesión de uno de los violadores con los dientes de la chica, por lo que no hace mas que pedirle que se los muestre, para este sujetarlos con la mano, simulando arrancárselos con los dedos.
Obviamente, se consigue que estos tipos nos caigan mal, pronto el espectador se posiciona al lado de la chica, y espera la justa venganza. Y ahí la cosa gana enteros. Los niveles de sadismo, y los métodos de tortura que emplea la jovencita, dejan los métodos de los violadores al nivel de una peli de Pixar. No voy a “Spoilear”, pero el festival de sangre y salvajadas que nos propone la venganza femenina de I SPIT IN YOUR GRAVE, es de lo mejorcito y más brutal, que vamos a poder ver en una película mainstream de estas características.
Técnicamente, los movimientos de cámara frenéticos, los bosques de seco follaje, las botazas Timberland que lucen los violadores, las canoas y las cabañas de madera, ayudan a que nos metamos en la película, y la vivamos. No me lo esperaba, y he quedado súper satisfecho con este visionado. Eso sí, misóginos, absténganse de verla
Le da mil vueltas a la original.
Dirige Steven R. Monroe, hombre orquesta en labores cinematográficas (ha hecho de todo en todo tipo de productos), que entre sus películas destacarían AL ACECHO y OGRE. Lo que son las cosas; en la reseña de esta ultima, despreciaba su labor como director. Hoy me parece un director cojonudo…
No se lo pierdan, el tipo sigue apuntado al tema de los remakes, y está de lleno metido en uno de ¡LA BESTIA DEL REINO!
Ya saben, una jovencita, se va a unos bosques de la America profunda a hacer no se qué, cuando unos “Rednecks” la cogen por banda y la violan y apalizan brutalmente. Hasta el Sheriff se apunta al atracón de sadismo. Mas muerta que viva, la joven logra escapar, y tras unos días, vuelve hecha una fiera, para eliminar uno a uno a sus violadores, retrasado mental incluido.
Normalmente, este tipo de remakes, suelen cagarla con el reparto; los violadores, son en exceso guapos. Aquí, no ocurre como en el remake de LA ULTIMA CASA A LA IZQUIERDA, en la que los violadores son poco menos que Top models masculinos, incluso, el que hace de Sheriff, y el retrasado mental, están bastante logrados, pero si es cierto que les falta un poco de sordidez y mala baba a esos rostros. Pero una vez superadas estas cuestiones, y analizando la película globalmente, he de decir, no solo que es una gran película, si no que supera, de largo, la gran bazofia que es la original, eso comparando. Si la tomamos como película independiente, la cosa es mejor aún.
La historia está muy trillada, así que la única forma que tienen los responsables de volver este producto atractivo, es pasándose tres pueblos, y esa es la baza fuerte de la película; que es mas bruta que un arado.
Durante las escenas de violación, tan graficas y despiadadas, el espectador siente desasosiego y mal rollo, porque no se cortan un pelo; Los paletos arrodillan a la chica, y en planos súper largos, le hacen mamar como si fuera una polla, una pistola y una botella. A eso, añádanle la obsesión de uno de los violadores con los dientes de la chica, por lo que no hace mas que pedirle que se los muestre, para este sujetarlos con la mano, simulando arrancárselos con los dedos.
Obviamente, se consigue que estos tipos nos caigan mal, pronto el espectador se posiciona al lado de la chica, y espera la justa venganza. Y ahí la cosa gana enteros. Los niveles de sadismo, y los métodos de tortura que emplea la jovencita, dejan los métodos de los violadores al nivel de una peli de Pixar. No voy a “Spoilear”, pero el festival de sangre y salvajadas que nos propone la venganza femenina de I SPIT IN YOUR GRAVE, es de lo mejorcito y más brutal, que vamos a poder ver en una película mainstream de estas características.
Técnicamente, los movimientos de cámara frenéticos, los bosques de seco follaje, las botazas Timberland que lucen los violadores, las canoas y las cabañas de madera, ayudan a que nos metamos en la película, y la vivamos. No me lo esperaba, y he quedado súper satisfecho con este visionado. Eso sí, misóginos, absténganse de verla
Le da mil vueltas a la original.
Dirige Steven R. Monroe, hombre orquesta en labores cinematográficas (ha hecho de todo en todo tipo de productos), que entre sus películas destacarían AL ACECHO y OGRE. Lo que son las cosas; en la reseña de esta ultima, despreciaba su labor como director. Hoy me parece un director cojonudo…
No se lo pierdan, el tipo sigue apuntado al tema de los remakes, y está de lleno metido en uno de ¡LA BESTIA DEL REINO!
miércoles, 20 de julio de 2011
MORBUS (O BON PROFIT)
A estas alturas de la vida, huelga decir, que esta película, mas que por su condición de “Explotation” su erotismo o su terror, es famosa por ser una película cuyo guión fue escrito nada mas y nada menos que por Isabel Coixet. El máximo exponente del cine español de calidad, el referente feminista e intelectual por excelencia, y soldado del buen gusto cinematográfico no solo plagia una fotografía para hacer el cartel de su ultima película, si no que antes, en 1983, escribió un guión para una película de tetas e higadillos, en el que ni hombres ni mujeres salen bien parados, pero desde luego, ellas quedan como tontas y putas. Y, por supuesto, ni es cine de calidad, ni aboga por la feminidad, y ni mucho menos, contiene un solo plano que muestre algo de buen gusto. Se ve que por aquel entonces, la Coixet, no tenía principios –ni gafas de pasta- la muy penca. Me encantaría saber su opinión actual acerca de la película.
Un farmacéutico con ínfulas de científico loco, crea un suero que debidamente inyectado en los cadáveres, los devuelve a la vida (¡¡¡Dos años antes que en RE-ANIMATOR!!!). Por otro lado, una joven desnuda, acaba viendo a estos zombies en el campo, los cuales combatirá, junto a un pedante escritor, dentro de una cabaña (¡¡¡Como en POSESION INFERNAL!!!) en la cual vive el.
Simpática película, llena de zombies, polvadas, descerebre, delirio, tetas, felpudos peludos y chascarrillos, por encima de la sangre que puedan derramar las víctimas de estos zombies. Imposible tomársela en serio. Al final, resulta un entretenimiento mas cercano a la comedia que al terror, ni tan mala como cabía esperar, ni lo suficientemente buena para considerarla algo mas. Y lo mejor de todo, son los diálogos de besugo, incoherentes y desquiciados, que salieron de la pluma de Isabel Coixet. Hija mía, o estabas de cachondeo antes, o lo estás ahora, pero lo cierto es que te prefiero poniendo frases a esta panda de zumbaos, que filmándole el ojete y las lorzas a Sergi Lopez, y dándotelas de filmadora de cuerpos naturales.
En definitiva, me parece una peliculita muy maja, y con muchos, muchos zombies. Por eso, tras verla, no me explico como esta película, ha podido pasar tan inadvertida en todas esas guías de cine Zombie que tan de moda están en la actualidad, y que se vanaglorian de indagar hasta los recovecos más ocultos de las cinematografías mas oscuras: si hay una película genuinamente zombie, es esta, rodada en Cataluña en los ochenta.
En el reparto, Joan Borrás, carismático actor catalán que ya desprendería una bis cómica a prueba de bombas en la dupla “Del porro”, y un sobresaliente Víctor Israel, que haciendo de criado que habla un extraño dialecto, y reservándose algunas de las mejores y mas tórridas escenas, nos preguntamos que pinta el en todo este “fregao”. Descacharrante.
Dirige Ignasi P. Ferré, de filmografía desconocida para mí, y bastante escueta parece ser.
Insisto, para mi esta película, si hacerme rasgar las vestiduras, ha sido todo un descubrimiento.
Un farmacéutico con ínfulas de científico loco, crea un suero que debidamente inyectado en los cadáveres, los devuelve a la vida (¡¡¡Dos años antes que en RE-ANIMATOR!!!). Por otro lado, una joven desnuda, acaba viendo a estos zombies en el campo, los cuales combatirá, junto a un pedante escritor, dentro de una cabaña (¡¡¡Como en POSESION INFERNAL!!!) en la cual vive el.
Simpática película, llena de zombies, polvadas, descerebre, delirio, tetas, felpudos peludos y chascarrillos, por encima de la sangre que puedan derramar las víctimas de estos zombies. Imposible tomársela en serio. Al final, resulta un entretenimiento mas cercano a la comedia que al terror, ni tan mala como cabía esperar, ni lo suficientemente buena para considerarla algo mas. Y lo mejor de todo, son los diálogos de besugo, incoherentes y desquiciados, que salieron de la pluma de Isabel Coixet. Hija mía, o estabas de cachondeo antes, o lo estás ahora, pero lo cierto es que te prefiero poniendo frases a esta panda de zumbaos, que filmándole el ojete y las lorzas a Sergi Lopez, y dándotelas de filmadora de cuerpos naturales.
En definitiva, me parece una peliculita muy maja, y con muchos, muchos zombies. Por eso, tras verla, no me explico como esta película, ha podido pasar tan inadvertida en todas esas guías de cine Zombie que tan de moda están en la actualidad, y que se vanaglorian de indagar hasta los recovecos más ocultos de las cinematografías mas oscuras: si hay una película genuinamente zombie, es esta, rodada en Cataluña en los ochenta.
En el reparto, Joan Borrás, carismático actor catalán que ya desprendería una bis cómica a prueba de bombas en la dupla “Del porro”, y un sobresaliente Víctor Israel, que haciendo de criado que habla un extraño dialecto, y reservándose algunas de las mejores y mas tórridas escenas, nos preguntamos que pinta el en todo este “fregao”. Descacharrante.
Dirige Ignasi P. Ferré, de filmografía desconocida para mí, y bastante escueta parece ser.
Insisto, para mi esta película, si hacerme rasgar las vestiduras, ha sido todo un descubrimiento.
THE TUNNEL
La idea de que bajo nuestro suelo, por ahí las cloacas y sus interminables redes de pasillos y habitáculos, se haya creado un nuevo tipo de ser vivo a base de mutar humanos (los vagabundos que, dicen, allí habitan) con bacterias, enfermedades o vaya usted a ser qué, es algo que resulta genuinamente fascinante. Por eso el cine se ha encargado de traducirlo a imágenes en más de una ocasión (aunque no suficientes). "Subhumanos" creo que fue el primer intento, y aunque loable por su originalidad, el modo de enfocar la cosa no cuajaba. Después vino la fallida "C.H.U.D.", seguida años después por "Creep", bastante potable, aunque tampoco redonda. La más reciente aportación al asunto se titula "The Tunnel", llega de Australia y se adapta al formato de "falso documental" parido -o perfeccionado- por ese film de indudable importancia histórica que fue "El proyecto de la bruja de Blair". La diferencia con el resto de "found footage" está en que no pretende engañarnos, ni tan siquiera hasta los títulos del final, en "The Tunnel" queda claro que estamos viendo una ficción desde los créditos iniciales. Curioso.
Supongo que a ello contribuyó el hecho de que la creación del film fue seguida desde buen principio por aquellos que visitaban su página web oficial y -creo haberlo entendido así- contribuían a su realización a base de pequeñas aportaciones monetarias... o de ideas... en fin, no se, se trata de una nueva práctica que están comenzando a desarrollar algunos cineastas nóveles. Hay otro aspecto novedoso que acompaña a "The Tunnel": es la primera peli con el sello de una "major" -la Paramount- que se distribuye gratuitamente por internet, al mismo tiempo que sale a la venta en DVD. Curioso también.
Con "The Tunnel" estamos ante un compendio muy completo de todos los tics, virtudes y defectos propios de lo que llamamos "falso documental de terror". La historia se desarrolla en Sydney, donde comienza a escasear el agua. Al gobierno se le ocurre aprovechar el líquido que corre bajo la ciudad, pero de pronto el proyecto se detiene y nadie más habla de el, ni quiere hacerlo. Una periodista, intrigada por tan repentino silencio, decide bajar a investigar y... en fin, comienzan los problemas.
Pues sí, tenemos infrarrojos para parar un tren, carreras a través de angostos pasillos donde la cámara se tambalea sin parar, discusiones de los personajes, momentos de gilipollismo entre ellos (aunque menos de lo habitual ya que, sorprendentemente, son todos adultos)... pero también unas buenas dosis de inquietud y suspense, unas criaturas que, aunque en ningún momento se dejan ver al cien por cien, convencen y, eso sí, una secuencia francamente aterradora en la que una de ellas agrede a un segurata al que previamente ha desprovisto de sus ojos, todo visto a través de los infrarrojos de la cámara y con el más acongojante silencio como única banda sonora.
Si "The Tunnel" hace historia será más por su método de rodaje y de distribución que por sus méritos como película, pero dentro del cada vez más amplio subgénero del "found footage" puede que esté entre lo más potable y bien parido que han visto estos cansados ojos (verdes!).
Supongo que a ello contribuyó el hecho de que la creación del film fue seguida desde buen principio por aquellos que visitaban su página web oficial y -creo haberlo entendido así- contribuían a su realización a base de pequeñas aportaciones monetarias... o de ideas... en fin, no se, se trata de una nueva práctica que están comenzando a desarrollar algunos cineastas nóveles. Hay otro aspecto novedoso que acompaña a "The Tunnel": es la primera peli con el sello de una "major" -la Paramount- que se distribuye gratuitamente por internet, al mismo tiempo que sale a la venta en DVD. Curioso también.
Con "The Tunnel" estamos ante un compendio muy completo de todos los tics, virtudes y defectos propios de lo que llamamos "falso documental de terror". La historia se desarrolla en Sydney, donde comienza a escasear el agua. Al gobierno se le ocurre aprovechar el líquido que corre bajo la ciudad, pero de pronto el proyecto se detiene y nadie más habla de el, ni quiere hacerlo. Una periodista, intrigada por tan repentino silencio, decide bajar a investigar y... en fin, comienzan los problemas.
Pues sí, tenemos infrarrojos para parar un tren, carreras a través de angostos pasillos donde la cámara se tambalea sin parar, discusiones de los personajes, momentos de gilipollismo entre ellos (aunque menos de lo habitual ya que, sorprendentemente, son todos adultos)... pero también unas buenas dosis de inquietud y suspense, unas criaturas que, aunque en ningún momento se dejan ver al cien por cien, convencen y, eso sí, una secuencia francamente aterradora en la que una de ellas agrede a un segurata al que previamente ha desprovisto de sus ojos, todo visto a través de los infrarrojos de la cámara y con el más acongojante silencio como única banda sonora.
Si "The Tunnel" hace historia será más por su método de rodaje y de distribución que por sus méritos como película, pero dentro del cada vez más amplio subgénero del "found footage" puede que esté entre lo más potable y bien parido que han visto estos cansados ojos (verdes!).
lunes, 18 de julio de 2011
VIOLACION Y ...?
Una de las películas que José Ramón Larraz realizó en su cacareada etapa en Reino Unido (sobrevaloradísima etapa) y nada nuevo en el horizonte; aburrimiento de primera categoría, aunque, eso si, multiplicado por tres.
Con cierto ramalazos de giallo Italiano, "Violación y...?" nos cuenta la historia de dos jóvenes alocados, ella modelo, él, sátiro y fotógrafo, que pretenden ir a perpetrar un robo a la mansión de un poderoso individuo. Una vez allí, además de tener mogollón de conversaciones sin relación alguna con lo que la película trata de contar, se comete un asesinato. Nuestros protagonistas continúan pululando por el lugar, totalmente impunes, mientras el espectador se pregunta: ¿Qué demonios es esto?
Con el potente título internacional de "Scream... and die!" y el sugerente título español de "Violación y...?" –aunque no presenciemos violación alguna- nos enfrentamos (nunca mejor dicho) a un bodriaco de aquellos que hacen historia, una película técnicamente superior a otro productos mas populares de José Ramón Larraz, pero, sin embargo, mucho mas aburrido que todos aquellos, ya de por si aburridísimos. Hasta los completistas podrían sentirse ofendidos ante tamaño truño.
No hay tempo, la historia que se nos cuenta, casi, nos la tenemos que imaginar y para colmo de males, la película es larga de pelotas. Ni siquiera el grafismo del par de asesinatos que contiene, ni el tamaño de las mamas de las actrices, que muestran alegremente en un par de momentos, la salvan de la mas despiadada y brutal de las quemas.
Para la ocasión, el bueno de Don José Ramón, firma la cinta con el obvio seudónimo de Joseph Larraz.
Con cierto ramalazos de giallo Italiano, "Violación y...?" nos cuenta la historia de dos jóvenes alocados, ella modelo, él, sátiro y fotógrafo, que pretenden ir a perpetrar un robo a la mansión de un poderoso individuo. Una vez allí, además de tener mogollón de conversaciones sin relación alguna con lo que la película trata de contar, se comete un asesinato. Nuestros protagonistas continúan pululando por el lugar, totalmente impunes, mientras el espectador se pregunta: ¿Qué demonios es esto?
Con el potente título internacional de "Scream... and die!" y el sugerente título español de "Violación y...?" –aunque no presenciemos violación alguna- nos enfrentamos (nunca mejor dicho) a un bodriaco de aquellos que hacen historia, una película técnicamente superior a otro productos mas populares de José Ramón Larraz, pero, sin embargo, mucho mas aburrido que todos aquellos, ya de por si aburridísimos. Hasta los completistas podrían sentirse ofendidos ante tamaño truño.
No hay tempo, la historia que se nos cuenta, casi, nos la tenemos que imaginar y para colmo de males, la película es larga de pelotas. Ni siquiera el grafismo del par de asesinatos que contiene, ni el tamaño de las mamas de las actrices, que muestran alegremente en un par de momentos, la salvan de la mas despiadada y brutal de las quemas.
Para la ocasión, el bueno de Don José Ramón, firma la cinta con el obvio seudónimo de Joseph Larraz.
EL ARRECIFE
Nunca dejará de sorprenderme el tirón que aún a día de hoy tienen los tiburones en esto del cine. Da igual si están en un cutre-telefilm o en una cosa así como de más calidad, al final su intrínseco atractivo sigue siendo el gancho de cara a la audiencia. De hecho, ya está en camino una peli del tema filmada en 3D, dispuesta para las plateas más adolescentes y menos exigentes del mercado "mainstream". Vamos, que la cosa tiene pinta de que no se va a agotar así como así. Sin embargo, el caso que nos ocupa se aleja un poco de esas pelis tirando más a chorras, enfocándolo desde una óptica hiper-realista y dramática... y es que a fin de cuentas, está basada en hechos reales.
Un grupo de amigos se van de vacaciones en un yate. Son adultos e inteligentes, así que nada de chillidos de aprobación, radio-casete soltando graznidos, birras, ni gilipolleces mil, ¡graziaz zeñor dioz!. Total, que la embarcación sufre un accidente y se hunde. El grupo -menos uno de ellos- decide nadar 10 millas pues asegura el experto que hay un islote. El problema, cansancio aparte, es que en el camino se toparán con un escualo tirando a hambriento.
El director, Andrew Traucki, ya venía de currarse algo parecido, pero cambiando tiburón por cocodrilo ("Black Water"), así que por lo visto el tema le va. En "El arrecife", producción Australiana que inevitablemente -por forma, estética, historia e intención- recuerda bastante a "Open Water" y "A la deriva", no esperéis salidas de tono, exageraciones, gore a tutiplén ni escualos gigantes que cantan y bailan... como decía, aquí se apuesta por el realismo más atroz (a lo que ayuda mucho la manejabilidad del vídeo, formato en el que está rodada la peli) y el puro drama a base de suspense. Hay que reconocer que el dire logra unos cuantos momentos genuinamente tensos/inquietantes/intensos partiendo de los pocos elementos con los que cuenta, y una banda sonora sutil pero eficaz. Además, el tiburón sale lo justo y necesario... y aunque creo que hay algun instante de CGI, es tan poca cosa -y está lo suficientemente bien parido- que no molesta nada. En general la peli destaca por su tremenda sobriedad, nada falta y nada sobra, y el desenlace es de esos que a mi me gustan. Aquí se termina la historia, no hay más. Fin.
Resumiendo: me moló mucho y me entretuvo a tope.
Un grupo de amigos se van de vacaciones en un yate. Son adultos e inteligentes, así que nada de chillidos de aprobación, radio-casete soltando graznidos, birras, ni gilipolleces mil, ¡graziaz zeñor dioz!. Total, que la embarcación sufre un accidente y se hunde. El grupo -menos uno de ellos- decide nadar 10 millas pues asegura el experto que hay un islote. El problema, cansancio aparte, es que en el camino se toparán con un escualo tirando a hambriento.
El director, Andrew Traucki, ya venía de currarse algo parecido, pero cambiando tiburón por cocodrilo ("Black Water"), así que por lo visto el tema le va. En "El arrecife", producción Australiana que inevitablemente -por forma, estética, historia e intención- recuerda bastante a "Open Water" y "A la deriva", no esperéis salidas de tono, exageraciones, gore a tutiplén ni escualos gigantes que cantan y bailan... como decía, aquí se apuesta por el realismo más atroz (a lo que ayuda mucho la manejabilidad del vídeo, formato en el que está rodada la peli) y el puro drama a base de suspense. Hay que reconocer que el dire logra unos cuantos momentos genuinamente tensos/inquietantes/intensos partiendo de los pocos elementos con los que cuenta, y una banda sonora sutil pero eficaz. Además, el tiburón sale lo justo y necesario... y aunque creo que hay algun instante de CGI, es tan poca cosa -y está lo suficientemente bien parido- que no molesta nada. En general la peli destaca por su tremenda sobriedad, nada falta y nada sobra, y el desenlace es de esos que a mi me gustan. Aquí se termina la historia, no hay más. Fin.
Resumiendo: me moló mucho y me entretuvo a tope.
miércoles, 13 de julio de 2011
X-MEN: PRIMERA GENERACIÓN
Cuando salieron las primeras imagenes y noticias de esta nueva entrega/precuela de la saga, me dejaron mas bien frío, no estaban mal pero tampoco estaban bien. No esperaba nada de esta película, y no soy el único por lo que me he ido encontrando en otras opiniones. Y eso ha sido un punto a su favor, porque me ha gustado.
El argumento hace un buen uso de la historia reciente de EEUU, y en concreto utiliza la crisis de los misiles de Cuba como desarrollo y climax final de la película. Por en medio metemos a un joven Charles Xavier, Eric Lehnsherr y la división mutante de la CIA, véase Darwin, Kaos, Mystica, Banshee, Angel y Bestia, juntos serán unos primigenios X-Men. Cada personaje tiene su motivación para unirse al grupo, unos por hacer algo bueno con sus poderes, otros por venganza, otros para intentar curarse, o para ganar un sueldo, pero juntos son el lado "bueno" de los mutantes. Por la parte de los villanos tenemos al club fuego infernal, es decir Sebastian Shaw y Emma Frost. También están con ellos Azazel, y Riptide (Marea en los comics españoles) al que pone cuerpo y no voz, porque no tiene ni una sola frase, el español Alex González.
La película dura dos horas pero pasa enseguida, el ritmo esta bastante bien llevado y no tiene ningún momento de bajón insuperable. Da igual que no te hayas leído los comics, esta película esta hecha para profanos y para los muy fans. Estos últimos pueden sacarle punta a que cierto personaje debería de ser mas mayor o mas joven en esa época, o que nunca se hubiera unido a un grupo como ese o cualquier otro error que pueda encontrar, y qué!!!olvidalo, disfruta de la película, sonríe con las referencias a las anteriores películas, o con algunas coñitas como la del pelo de Xavier, o simplemente admira la ambientación de decorados y escenarios, que a mi por ejemplo me gustaron mucho esos interiores del submarino a lo James Bond.
Entretenida es la palabra que define a la película, no haber esperado nada de ella, ha hecho que me divierta mucho mas. De la del Capitán América me se ya casi todo el argumento, pero si consigue que me lo pase como con esta, ya me vale.
El argumento hace un buen uso de la historia reciente de EEUU, y en concreto utiliza la crisis de los misiles de Cuba como desarrollo y climax final de la película. Por en medio metemos a un joven Charles Xavier, Eric Lehnsherr y la división mutante de la CIA, véase Darwin, Kaos, Mystica, Banshee, Angel y Bestia, juntos serán unos primigenios X-Men. Cada personaje tiene su motivación para unirse al grupo, unos por hacer algo bueno con sus poderes, otros por venganza, otros para intentar curarse, o para ganar un sueldo, pero juntos son el lado "bueno" de los mutantes. Por la parte de los villanos tenemos al club fuego infernal, es decir Sebastian Shaw y Emma Frost. También están con ellos Azazel, y Riptide (Marea en los comics españoles) al que pone cuerpo y no voz, porque no tiene ni una sola frase, el español Alex González.
La película dura dos horas pero pasa enseguida, el ritmo esta bastante bien llevado y no tiene ningún momento de bajón insuperable. Da igual que no te hayas leído los comics, esta película esta hecha para profanos y para los muy fans. Estos últimos pueden sacarle punta a que cierto personaje debería de ser mas mayor o mas joven en esa época, o que nunca se hubiera unido a un grupo como ese o cualquier otro error que pueda encontrar, y qué!!!olvidalo, disfruta de la película, sonríe con las referencias a las anteriores películas, o con algunas coñitas como la del pelo de Xavier, o simplemente admira la ambientación de decorados y escenarios, que a mi por ejemplo me gustaron mucho esos interiores del submarino a lo James Bond.
Entretenida es la palabra que define a la película, no haber esperado nada de ella, ha hecho que me divierta mucho mas. De la del Capitán América me se ya casi todo el argumento, pero si consigue que me lo pase como con esta, ya me vale.
martes, 12 de julio de 2011
CAPITÁN AMÉRICA
Ahora que el estreno de la nueva y apetecible versión del "Capitán América" está a la vuelta de la esquina, es el momento idóneo para recuperar y recordar este otro intento, facturado en el año 1990.
En realidad lo que pueda decir de ella, lo dije hace poco. Ya saben, mi teoría de que hay pelis que, para bien o para mal, necesitan hacerse con dinero, mucho dinero. Las de superhéroes entran en ese pack. Y es evidente que este "Capi" no contaba precisamente con un excesivo presupuesto. De hecho, su director, el mítico Albert Pyun (padre también de "Sueños Radiocativos", "Cyborg" o "Cromwell, el rey de los bárbaros"), argumentaba que había ocasiones durante el rodaje en las que, literalmente, la cuenta bancaria estaba a cero. Y claro, en esas condiciones, poca cosa podía hacerse. Así pues, el resultado final se asemeja al de "Robot Jox", es decir, "ha quedado mejor de lo que uno podría esperar dadas sus limitaciones, pero aún así sigue sabiendo a poco. Da la sensación de que todo el rato el film está al borde del descalabro absoluto y del cutrismo más sangrante... pero se salva por los pelos de un calvo".
Ya saben, eran otros tiempos. Todavía no se habían estrenado ni "Blade", ni "Spider-man", ni "Iron Man" y tampoco "Thor". Marvel llevaba años y años viendo cómo sus personajes eran arrastrados a la pantalla de modo miserable y burdo, mientras "DC" se lo comía todo. Y lo triste es que, en aquel momento, "Capitán América" se suponía su primer producto cinematográfico con "cara y ojos". Incluso Stan Lee, que estaba metido en la producción, se dejaba las pestañas para defender el trabajo del Sr.Pyun. De poco sirvió tanta patraña.
Pero vayamos a por la peli. El origen del personaje nos lo resumen en unos acelerados y renqueantes 20 minutos. Steve Rogers es un mindundi que se presta a un experimento del ejército para crear supersoldados. El primero de ellos es, obvio, el "Capi". No asistimos ni al entrenamiento, ni a las prácticas con el escudo, directamente lo vemos en un avión bromeando sobre su traje y lo poco útil que resulta para el camuflaje (¡buen intento!). De ahí a los aposentos de su archienemigo Cráneo Rojo (no excesivamente mal caracterizado después de todo), donde no le cuesta nada perder y acabar atado a un misil que aterrizará en Alaska y se congelará. En los años 90 despierta y decide terminar su misión.
En realidad el "Capitán América" de esta versión resulta poco superheróico y bastante incapaz. No es hasta el desenlace que hace algo propio de su supuesta condición, y tampoco es que se luzca mucho. El traje resulta algo ridículo, especialmente esas cacareadas -en su época- orejas de plástico. Al final se lleva algunos buenos primeros planos, y el simpático detalle de echarle una mirada al espectador... pero poco más.
Como decía antes, los problemas logísticos y monetarios durante el parimiento del film fueron constantes, y le pasaron factura. No me sorprende teniendo en cuenta que de todo ello se encargaba el ex-"Cannon" Menahem Golan, con su entonces nuevo invento, "21st Century Film Corporation". Al parecer se hicieron varias versiones distintas esperando obtener una que fuese satisfactoria, de ahí los innumerables retrasos y malos rollos, y de ahí la torpeza de ciertas secuencias que, curiosamente, contrastan con otras en las que el montador se luce a base de bien (especialmente en los momentos de acción -por pocos que sean-).
En definitiva, que como peli de superhéroes deja mucho que desear, es sosilla, tirando a aburrida y estéticamente algo telefílmica. No se puede negar que Albert Pyun se esfuerza en salir airoso, sin conseguirlo. No obstante, enfrentarse a ella sabiendo lo que hay, y dispuesto a ser misericorde, ayuda.
El reparto no está ni tan mal, Ronny Cox, Ned Beatty, Darren McGavin... y una apetitosa Francesca Neri.
Menos es nada.
En realidad lo que pueda decir de ella, lo dije hace poco. Ya saben, mi teoría de que hay pelis que, para bien o para mal, necesitan hacerse con dinero, mucho dinero. Las de superhéroes entran en ese pack. Y es evidente que este "Capi" no contaba precisamente con un excesivo presupuesto. De hecho, su director, el mítico Albert Pyun (padre también de "Sueños Radiocativos", "Cyborg" o "Cromwell, el rey de los bárbaros"), argumentaba que había ocasiones durante el rodaje en las que, literalmente, la cuenta bancaria estaba a cero. Y claro, en esas condiciones, poca cosa podía hacerse. Así pues, el resultado final se asemeja al de "Robot Jox", es decir, "ha quedado mejor de lo que uno podría esperar dadas sus limitaciones, pero aún así sigue sabiendo a poco. Da la sensación de que todo el rato el film está al borde del descalabro absoluto y del cutrismo más sangrante... pero se salva por los pelos de un calvo".
Ya saben, eran otros tiempos. Todavía no se habían estrenado ni "Blade", ni "Spider-man", ni "Iron Man" y tampoco "Thor". Marvel llevaba años y años viendo cómo sus personajes eran arrastrados a la pantalla de modo miserable y burdo, mientras "DC" se lo comía todo. Y lo triste es que, en aquel momento, "Capitán América" se suponía su primer producto cinematográfico con "cara y ojos". Incluso Stan Lee, que estaba metido en la producción, se dejaba las pestañas para defender el trabajo del Sr.Pyun. De poco sirvió tanta patraña.
Pero vayamos a por la peli. El origen del personaje nos lo resumen en unos acelerados y renqueantes 20 minutos. Steve Rogers es un mindundi que se presta a un experimento del ejército para crear supersoldados. El primero de ellos es, obvio, el "Capi". No asistimos ni al entrenamiento, ni a las prácticas con el escudo, directamente lo vemos en un avión bromeando sobre su traje y lo poco útil que resulta para el camuflaje (¡buen intento!). De ahí a los aposentos de su archienemigo Cráneo Rojo (no excesivamente mal caracterizado después de todo), donde no le cuesta nada perder y acabar atado a un misil que aterrizará en Alaska y se congelará. En los años 90 despierta y decide terminar su misión.
En realidad el "Capitán América" de esta versión resulta poco superheróico y bastante incapaz. No es hasta el desenlace que hace algo propio de su supuesta condición, y tampoco es que se luzca mucho. El traje resulta algo ridículo, especialmente esas cacareadas -en su época- orejas de plástico. Al final se lleva algunos buenos primeros planos, y el simpático detalle de echarle una mirada al espectador... pero poco más.
Como decía antes, los problemas logísticos y monetarios durante el parimiento del film fueron constantes, y le pasaron factura. No me sorprende teniendo en cuenta que de todo ello se encargaba el ex-"Cannon" Menahem Golan, con su entonces nuevo invento, "21st Century Film Corporation". Al parecer se hicieron varias versiones distintas esperando obtener una que fuese satisfactoria, de ahí los innumerables retrasos y malos rollos, y de ahí la torpeza de ciertas secuencias que, curiosamente, contrastan con otras en las que el montador se luce a base de bien (especialmente en los momentos de acción -por pocos que sean-).
En definitiva, que como peli de superhéroes deja mucho que desear, es sosilla, tirando a aburrida y estéticamente algo telefílmica. No se puede negar que Albert Pyun se esfuerza en salir airoso, sin conseguirlo. No obstante, enfrentarse a ella sabiendo lo que hay, y dispuesto a ser misericorde, ayuda.
El reparto no está ni tan mal, Ronny Cox, Ned Beatty, Darren McGavin... y una apetitosa Francesca Neri.
Menos es nada.
domingo, 10 de julio de 2011
F.B.I. FRIKIS BUSCAN INCORDIAR
Decido revisar esta película seis años después de haberla visto por primera vez y un par de veces. Tampoco es la primera vez que escribo unas líneas sobre ella, ya le dediqué algunos torpes renglones en su momento. Y me sigue encantando, y me siguen entusiasmando según que “Freaks”. Además, es una prueba fehaciente de que si ya en 2004 –que conste que yo si defiendo algunos tipos de telebasura- se acusaba a la televisión de ser una mierda, ahora, con tanto canal, con tanto TDT, si que la televisión es una autentica mierda. Antes al menos teníamos cuatro furcias, tres maricones y cinco o seis retrasados mentales para reírnos de ellos, teníamos unos “entertainments” de maneras y éticas mas o menos cuestionables como eran Javier Sardá o Javier Cárdenas, pero ¿Ahora?, ¿Qué coño es lo que tenemos ahora? Nada más que estúpidas rifas para timar a los televidentes y porno soft de quinta categoría.
Y en aquellos, aun recientes, pero ya lejanos años de euforia televisiva, con el programa “Cronicas Marcianas” dominando el “Share” a base de mostrar sin tapujos todo tipo de debilidades humanas (y todo tipo de indecencias), precisamente a Javier Cárdenas, colaborador de dicho programa, se le ocurre hacer una película de bromas, con estos freaks que amenizaban las noches televisivas, como principal reclamo, victimas y/o verdugos de las bromas de cámara oculta ( o no) que el periodista filmaría en Mini-DV. Nada nuevo, las películas de cámara oculta ya existían; los Austrialanos eran expertos, y Manuel Summers había conseguido grandes éxitos de taquilla con cosas como TO ER MUNDO E GÜENO, o TO ER MUNDO E MEJÓ.
La campaña televisiva a la que fue sometida la película, así como las querellas que algunos de lo protagonistas de la película, interpusieron contra su director, la convirtieron en un éxito.
Y vista hoy, la cosa está entretenida, por supuesto, pero nos damos cuenta de lo efímeras que son las cosas. Ya nadie se acuerda de “La pitonisa Lola” o del maravilloso Joan Antoni Estades de Montcaire i Bisbal. Carmen de Mairena caló hondo y por eso su recuerdo aun pervive, pero no tardara en sumirse en el mas absoluto de los olvidos. Y claro está, que como estos personajes ya no están de actualidad, las bromas que protagonizan han perdido gracia (que no fuerza… recuerden que Paco Porras, casi muere en el mar, remolcado por una lancha motora), porque dichas bromas tienen mucho que ver con lo que estos pobres retardados nos ofrecían en la pequeña pantalla.
De todas formas, la película me sigue pareciendo una obra maestra del humor cafre, y sigue teniendo un lugar de honor en mi dvdteca, pero llego a la siguiente conclusión; dentro de unos quince años, ¿Cómo quedará esta peli en el recuerdo?, un individuo que la vea de primeras, sin saber absolutamente nada de los personajes que la protagonizan, ¿Qué opinará sobre ella?, pues probablemente, ambas cuestiones se respondan con otra pregunta; ¿Esto que cojones es?
No obstante, como película, si la desparejamos de su pareja, la televisión, si que con el tiempo, puede llegar a convertirse en “aquella extraña película de bromas que protagonizaban cuatro retrasados mentales de la televisión de aquellos años”. O al menos, eso espero.
Por cierto, acojonante la intervención de Carlos Pumares, haciendo una acertada crítica de la película PEARL HARBOUR: “Te cuenta una derrota, como si fuera una victoria”.
Y en aquellos, aun recientes, pero ya lejanos años de euforia televisiva, con el programa “Cronicas Marcianas” dominando el “Share” a base de mostrar sin tapujos todo tipo de debilidades humanas (y todo tipo de indecencias), precisamente a Javier Cárdenas, colaborador de dicho programa, se le ocurre hacer una película de bromas, con estos freaks que amenizaban las noches televisivas, como principal reclamo, victimas y/o verdugos de las bromas de cámara oculta ( o no) que el periodista filmaría en Mini-DV. Nada nuevo, las películas de cámara oculta ya existían; los Austrialanos eran expertos, y Manuel Summers había conseguido grandes éxitos de taquilla con cosas como TO ER MUNDO E GÜENO, o TO ER MUNDO E MEJÓ.
La campaña televisiva a la que fue sometida la película, así como las querellas que algunos de lo protagonistas de la película, interpusieron contra su director, la convirtieron en un éxito.
Y vista hoy, la cosa está entretenida, por supuesto, pero nos damos cuenta de lo efímeras que son las cosas. Ya nadie se acuerda de “La pitonisa Lola” o del maravilloso Joan Antoni Estades de Montcaire i Bisbal. Carmen de Mairena caló hondo y por eso su recuerdo aun pervive, pero no tardara en sumirse en el mas absoluto de los olvidos. Y claro está, que como estos personajes ya no están de actualidad, las bromas que protagonizan han perdido gracia (que no fuerza… recuerden que Paco Porras, casi muere en el mar, remolcado por una lancha motora), porque dichas bromas tienen mucho que ver con lo que estos pobres retardados nos ofrecían en la pequeña pantalla.
De todas formas, la película me sigue pareciendo una obra maestra del humor cafre, y sigue teniendo un lugar de honor en mi dvdteca, pero llego a la siguiente conclusión; dentro de unos quince años, ¿Cómo quedará esta peli en el recuerdo?, un individuo que la vea de primeras, sin saber absolutamente nada de los personajes que la protagonizan, ¿Qué opinará sobre ella?, pues probablemente, ambas cuestiones se respondan con otra pregunta; ¿Esto que cojones es?
No obstante, como película, si la desparejamos de su pareja, la televisión, si que con el tiempo, puede llegar a convertirse en “aquella extraña película de bromas que protagonizaban cuatro retrasados mentales de la televisión de aquellos años”. O al menos, eso espero.
Por cierto, acojonante la intervención de Carlos Pumares, haciendo una acertada crítica de la película PEARL HARBOUR: “Te cuenta una derrota, como si fuera una victoria”.
ROBOT JOX
"Robot Jox" fue la película que enterró a la afamada y legendaria "Empire Pictures". Charles Band llevaba unos años apostando por productos de mayor engundia presupuestaria, especialmente desde el éxito de "Re-Animator". Y claro, poco a poco la cosa se le fue de las manos, directo a la bancarrota, justo en plena realización de "Robot Jox", la que era su peli más ambiciosa hasta el momento (de ahí que de ella se encargara el "niño mimado" de la compañía en esa época, el mismo Stuart Gordon). El film quedó flotando en el limbo de los olvidados hasta que, un par de años después, otra compañía se hizo con el y lo lanzó. Claro que para entonces, pensar en recuperar los 10 millones de dólares que había costado era ya un sueño imposible.
En el futuro, y con el fin de ahorrarse guerras, los conflictos entre grandes potencias se resolverán en una arena y a base de robots gigantes ahostiándose hasta convertirse en chatarra. Aquiles es el mejor piloto, y está apunto de enfrentarse a su eterno rival, Alexander, lo que desencadenará el culebrón de rigor.
El mayor problema de "Robot Jox" es que sus ambiciones sobrepasan sus medios. Vamos, que aunque el presupuesto era alto... no llegaba para lo que Stuart Gordon y el magnate de "Empire" pretendían mostrar. Por eso mismo, peleas de robots hay pocas, abunda más el material de personajes/diálogos y sus movidas. Encima, la gran mayoría del film se desarrolla en interiores, por lo que la sensación de calustrofóbia es notoria.
"Robot Jox" siempre está al borde de resultar hiper-cutre, pero se salva por los pelos. Las batallas robóticas se las debemos a las artes del maestro del stop-motion David Allen. Y sí, son bien majas, aunque a inicios de los 90 el efecto "foto-foto" ya comenzaba a resultar algo añejo y pasado de moda.
Sin embargo, y a diferencia de mi primer y ya lejano visionado, esta vez la peli me entró bien... no es que sea la cosa más entretenida del mundo, ni la más vibrante, pero tampoco aburre. Lo que resulta imposible negar es que "Robot Jox" fue visionaria; hasta entonces nadie se había atrevido con robots gigantes, dándoles un enfoque serio y moderno. Un "hurra" por Band y los suyos.
En el reparto destacan el eterno malo de la serie B, Paul Koslo, y Jeffrey Combs en un papel minúsculo. En el apartado técnico, varios integrantes de la factoría "Empire"... aunque esta vez no encontramos a Richard Band en funciones compositivas. Raro, estaría con la gripe, digo yo.
Frikada: Antes de cada combate, los pilotos y su equipo sueltan la coletilla "Crash & Burn". Curiosamente, unos años después, y ya instalado en "Full Moon Entertainment", Charles Band lo usaría como título para otra epopeya de robots gigantes dándose yoyas, lo que llevó a que en algunos países de Europa se la tomaran como un "Robot Jox 2".
En el futuro, y con el fin de ahorrarse guerras, los conflictos entre grandes potencias se resolverán en una arena y a base de robots gigantes ahostiándose hasta convertirse en chatarra. Aquiles es el mejor piloto, y está apunto de enfrentarse a su eterno rival, Alexander, lo que desencadenará el culebrón de rigor.
El mayor problema de "Robot Jox" es que sus ambiciones sobrepasan sus medios. Vamos, que aunque el presupuesto era alto... no llegaba para lo que Stuart Gordon y el magnate de "Empire" pretendían mostrar. Por eso mismo, peleas de robots hay pocas, abunda más el material de personajes/diálogos y sus movidas. Encima, la gran mayoría del film se desarrolla en interiores, por lo que la sensación de calustrofóbia es notoria.
"Robot Jox" siempre está al borde de resultar hiper-cutre, pero se salva por los pelos. Las batallas robóticas se las debemos a las artes del maestro del stop-motion David Allen. Y sí, son bien majas, aunque a inicios de los 90 el efecto "foto-foto" ya comenzaba a resultar algo añejo y pasado de moda.
Sin embargo, y a diferencia de mi primer y ya lejano visionado, esta vez la peli me entró bien... no es que sea la cosa más entretenida del mundo, ni la más vibrante, pero tampoco aburre. Lo que resulta imposible negar es que "Robot Jox" fue visionaria; hasta entonces nadie se había atrevido con robots gigantes, dándoles un enfoque serio y moderno. Un "hurra" por Band y los suyos.
En el reparto destacan el eterno malo de la serie B, Paul Koslo, y Jeffrey Combs en un papel minúsculo. En el apartado técnico, varios integrantes de la factoría "Empire"... aunque esta vez no encontramos a Richard Band en funciones compositivas. Raro, estaría con la gripe, digo yo.
Frikada: Antes de cada combate, los pilotos y su equipo sueltan la coletilla "Crash & Burn". Curiosamente, unos años después, y ya instalado en "Full Moon Entertainment", Charles Band lo usaría como título para otra epopeya de robots gigantes dándose yoyas, lo que llevó a que en algunos países de Europa se la tomaran como un "Robot Jox 2".
PESTAÑAS POSTIZAS
Un dramón que cuenta la historia de una actriz casi cincuentona y decadente, que ante la poca oferta de trabajo se ve obligada a prostituirse en burdeles de poca monta. Tiene un novio jovencillo al cual mantiene. Un buen día, a ella le sale un trabajillo en el teatro, a la vez que a el, le sale algo similar, capitaneado por una vieja actriz rival, que lo que pretende es acostarse con el joven efebo.
Un autentico bodrio, con un tufo rancio que tira para atrás y con unas actuaciones acartonadas y teatrales que por momentos rozan la vergüenza ajena. Destaca la intervención de Paco Valladares haciendo de mariquita con bata de guatiné, de manera muy poco convincente. En la vida un gay ha parecido mas heterosexual. Horrorosa. Pero, su fama de maldita, es la que me ha animado a verla.
Se trata de la primera película que protagonizó Antonio Banderas, y también, la primera película que produjo Pedro Almodóvar. De hecho, es un reflejo de lo que en los próximos años sería su cine como director (Maruejeo, homosexualidad, decadencia y relaciones turbias).
La gracia está en que la película no llegó ni a estrenarse, de hecho no llegó a obtener la licencia de exhibición. Permaneció metida en su lata, hasta que alguna televisión la compró y la emitió. Su director, Enrique Belloch, no volvió a hacer una sola película.
¿Quién dijo que los inicios de las estrellas consagradas fueron fáciles?
Eso si, la película no merece la pena en absoluto, pero si tienen curiosidad…. Yo también la he tenido.
Un autentico bodrio, con un tufo rancio que tira para atrás y con unas actuaciones acartonadas y teatrales que por momentos rozan la vergüenza ajena. Destaca la intervención de Paco Valladares haciendo de mariquita con bata de guatiné, de manera muy poco convincente. En la vida un gay ha parecido mas heterosexual. Horrorosa. Pero, su fama de maldita, es la que me ha animado a verla.
Se trata de la primera película que protagonizó Antonio Banderas, y también, la primera película que produjo Pedro Almodóvar. De hecho, es un reflejo de lo que en los próximos años sería su cine como director (Maruejeo, homosexualidad, decadencia y relaciones turbias).
La gracia está en que la película no llegó ni a estrenarse, de hecho no llegó a obtener la licencia de exhibición. Permaneció metida en su lata, hasta que alguna televisión la compró y la emitió. Su director, Enrique Belloch, no volvió a hacer una sola película.
¿Quién dijo que los inicios de las estrellas consagradas fueron fáciles?
Eso si, la película no merece la pena en absoluto, pero si tienen curiosidad…. Yo también la he tenido.
sábado, 9 de julio de 2011
UNA SILUETA EN LA OSCURIDAD
En un portal de descargas, al lado de los mas recientes estrenos, reposaba esta película de sugerente titulo y carátula, y aunque, obviamente no picamos, al menos yo si que pensé que trataba de alguna cutre y chabacana producción barata proveniente de Argentina, Chile o Perú, y por lo tanto, merecedora de todo mi interés. Pero no. Se trataba de una película amateur española, corriente y moliente, realizada por un aficionado. No un aficionado de estos con el ego por las nubes (Ejem!) que gozan hasta de cierto nombre dentro del fandom, no, no. Esto no es nada de eso.
Antonio Torres, ajeno a que existe una escena, lleva desde 1994, con la ayuda de sus amistades y familiares, rodando largometrajes en vídeo de los mas variados pelajes y géneros, y los hace como churros (en todos los sentidos), contando con casi cien trabajos en su haber, ya sean estos largos o cortos.
Nuestro acercamiento a su obra, cuando a la mayoría de productos de esta calaña, no les prestamos ni un segundo de nuestra atención, ha sido por lo genuino en la actitud del director Cordobés. Como ya he dicho antes, es ajeno a otras escenas, y por lo tanto, al no tener que destacar en un mundillo lleno de envidias y odios, el tipo se despoja de toda pose. Antonio Torres no pretende ser “The ultimate horror gore director” ni “El carnicero Cordobés” ni “El cineasta amateur definitivo”; El hace sus películas, las proyecta en el centro cívico de su pueblo, intenta vender los deuvedeses vía Internet, rueda otra película mas, y a dormir, que mañana toca ir al centro comercial con la parienta.
No se cree un director de verdad (¿O si?), y esa ingenuidad dota al producto de frescura. No tiene que competir, así que se puede permitir el lujo de hacer una película peor que la anterior o añadir insertos de películas tan populares como el PIRAÑA de Joe Dante, como también vimos en su último largo JUNGLA SALVAJE y quedarse mas pancho que ancho. Y la cosa está, tras ver un par de sus películas, en que, si, el producto es chusco y chabacano, pero no tan horripilante como la mayoría de productos amateur que ofrecen lo mismo, pero con un baño de camuflaje en el exterior, pretendiendo ser, o al menos parecer, lo que no son.
Lo mas importante e interesante de las películas de Antonio Torres, es que desprenden entusiasmo y frescura.
Así, nos tragamos (los tres integrantes del blog, aunque me haya tocado reseñarla a mi) del tirón, esta película.
Una pareja se va a una zona oscura de un polígono industrial con el fin de dar rienda suelta a los instintos, hasta que una siniestra presencia, da buena cuenta de ellos. Pronto se sucederán los asesinatos en ese barrio de Córdoba. La policía comienza a investigar, coincidiendo con la noticia de que un loco, asesino y violador, se ha escapado del manicomio y anda suelto. Por otro lado tenemos a una familia la cual tiene a uno de sus miembros con una deformación facial y usa una mascara para cubrirse. Todo ello, formará un cocktail de sangre y violencia que dará lugar a las más sanguinolentas situaciones.
De título deudor del “giallo” Italiano, artesanalmente gore, y con algunos momentos muy logrados (como la decapitación de una niña) y otros que cantan por soleares, tenemos un Slasher a la Cordobesa, libre de prejuicios, con un Antonio Torres como autor absoluto, que se defiende dirigiendo, editando la película y también actuando y creando los F/X.
Lenta a nivel general, con sus fallos de edición que son bastantes, también, y en la parte positiva, Torres hace juegos malabares, para crear atmósferas y asustar, simplemente añadiendo unas imágenes extraídas de Internet. Eso no lo logra cualquiera. Al menos de manera inconsciente.
Fuegos de artificio, los justos y escenas tan impactantes que dejarán secuela en tu cerebro y retinas.
En definitiva, y como diría su colega Joaquín Fernand (del que ya hablaremos por aquí largo y tendido) “una película desde el punto de vista creativo, llamativa”. Se la recomiendo.
Torres, ha dirigido también películas de terrores selváticos, como la anteriormente mentada JUNGLA SALVAJE, u homenajes a HARRY EL SUCIO con su saga de BLOCK, mas concretamente con la titulada MAGNUM 44.
Antonio Torres, ajeno a que existe una escena, lleva desde 1994, con la ayuda de sus amistades y familiares, rodando largometrajes en vídeo de los mas variados pelajes y géneros, y los hace como churros (en todos los sentidos), contando con casi cien trabajos en su haber, ya sean estos largos o cortos.
Nuestro acercamiento a su obra, cuando a la mayoría de productos de esta calaña, no les prestamos ni un segundo de nuestra atención, ha sido por lo genuino en la actitud del director Cordobés. Como ya he dicho antes, es ajeno a otras escenas, y por lo tanto, al no tener que destacar en un mundillo lleno de envidias y odios, el tipo se despoja de toda pose. Antonio Torres no pretende ser “The ultimate horror gore director” ni “El carnicero Cordobés” ni “El cineasta amateur definitivo”; El hace sus películas, las proyecta en el centro cívico de su pueblo, intenta vender los deuvedeses vía Internet, rueda otra película mas, y a dormir, que mañana toca ir al centro comercial con la parienta.
No se cree un director de verdad (¿O si?), y esa ingenuidad dota al producto de frescura. No tiene que competir, así que se puede permitir el lujo de hacer una película peor que la anterior o añadir insertos de películas tan populares como el PIRAÑA de Joe Dante, como también vimos en su último largo JUNGLA SALVAJE y quedarse mas pancho que ancho. Y la cosa está, tras ver un par de sus películas, en que, si, el producto es chusco y chabacano, pero no tan horripilante como la mayoría de productos amateur que ofrecen lo mismo, pero con un baño de camuflaje en el exterior, pretendiendo ser, o al menos parecer, lo que no son.
Lo mas importante e interesante de las películas de Antonio Torres, es que desprenden entusiasmo y frescura.
Así, nos tragamos (los tres integrantes del blog, aunque me haya tocado reseñarla a mi) del tirón, esta película.
Una pareja se va a una zona oscura de un polígono industrial con el fin de dar rienda suelta a los instintos, hasta que una siniestra presencia, da buena cuenta de ellos. Pronto se sucederán los asesinatos en ese barrio de Córdoba. La policía comienza a investigar, coincidiendo con la noticia de que un loco, asesino y violador, se ha escapado del manicomio y anda suelto. Por otro lado tenemos a una familia la cual tiene a uno de sus miembros con una deformación facial y usa una mascara para cubrirse. Todo ello, formará un cocktail de sangre y violencia que dará lugar a las más sanguinolentas situaciones.
De título deudor del “giallo” Italiano, artesanalmente gore, y con algunos momentos muy logrados (como la decapitación de una niña) y otros que cantan por soleares, tenemos un Slasher a la Cordobesa, libre de prejuicios, con un Antonio Torres como autor absoluto, que se defiende dirigiendo, editando la película y también actuando y creando los F/X.
Lenta a nivel general, con sus fallos de edición que son bastantes, también, y en la parte positiva, Torres hace juegos malabares, para crear atmósferas y asustar, simplemente añadiendo unas imágenes extraídas de Internet. Eso no lo logra cualquiera. Al menos de manera inconsciente.
Fuegos de artificio, los justos y escenas tan impactantes que dejarán secuela en tu cerebro y retinas.
En definitiva, y como diría su colega Joaquín Fernand (del que ya hablaremos por aquí largo y tendido) “una película desde el punto de vista creativo, llamativa”. Se la recomiendo.
Torres, ha dirigido también películas de terrores selváticos, como la anteriormente mentada JUNGLA SALVAJE, u homenajes a HARRY EL SUCIO con su saga de BLOCK, mas concretamente con la titulada MAGNUM 44.
viernes, 8 de julio de 2011
KAMIKAZE
"Kamikaze" es una producción Francesa del 86 que parte de una idea buena, muy buena, pero con un desarrollo algo patoso y que le impide ser la excelente película que podría haber sido.
Un inventor algo chalado es despedido de una empresa para la que curra. Ello incrementa su demencia, y el odio que siente hacia las presentadoras que asoman por la televisión. Así que inventa una máquina con la que, mediante hondas electromagnéticas y otras jergas paracientíficas, poder matarlas, provocándoles que les estalle el estómago. Naturalmente la policía no tarda nada en ponerse a investigar y aunque de entrada van muy perdidos, poco a poco comienzan a atar cabos.
Contada así suena muy bien, ¿verdad?, sin embargo supongo que los artífices (Luc Besson entre ellos, produciendo) decidieron, dado lo descabellado del planteamiento, enfocar su peli de un modo mas bien humorístico. Afortunadamente no llegan a excesos en ese campo, pero toda ella tiene un aire como a bufa que, a la larga, resulta molesto. Las secuencias de los crímenes catódicos están muy logradas, y hasta rezuman sangre, pero no se les saca todo el partido que hubiese sido de desear. En otras manos, y tal vez con más dinero, "Kamikaze" podría haber sido una peli original y estupenda repleta de momentos vibrantes... tal como está, se queda como una cosilla simpática, bastante visible, pero coja. Lástima.
Encima, pretenden que sintamos compasión por el asesino, ¡¡anda ya!!... ¡eso en una peli americana no pasaría, por dios!.
Un inventor algo chalado es despedido de una empresa para la que curra. Ello incrementa su demencia, y el odio que siente hacia las presentadoras que asoman por la televisión. Así que inventa una máquina con la que, mediante hondas electromagnéticas y otras jergas paracientíficas, poder matarlas, provocándoles que les estalle el estómago. Naturalmente la policía no tarda nada en ponerse a investigar y aunque de entrada van muy perdidos, poco a poco comienzan a atar cabos.
Contada así suena muy bien, ¿verdad?, sin embargo supongo que los artífices (Luc Besson entre ellos, produciendo) decidieron, dado lo descabellado del planteamiento, enfocar su peli de un modo mas bien humorístico. Afortunadamente no llegan a excesos en ese campo, pero toda ella tiene un aire como a bufa que, a la larga, resulta molesto. Las secuencias de los crímenes catódicos están muy logradas, y hasta rezuman sangre, pero no se les saca todo el partido que hubiese sido de desear. En otras manos, y tal vez con más dinero, "Kamikaze" podría haber sido una peli original y estupenda repleta de momentos vibrantes... tal como está, se queda como una cosilla simpática, bastante visible, pero coja. Lástima.
Encima, pretenden que sintamos compasión por el asesino, ¡¡anda ya!!... ¡eso en una peli americana no pasaría, por dios!.
miércoles, 6 de julio de 2011
NEUMONIA EROTICA Y PASOTA
A medida que voy descubriendo un nuevo título del fenómeno “S” en su ramalazo mas soft – recuerden que al final, esta calificación se le otorgaba prácticamente a cualquier película que no fuera infantil, ya que la “S”, obviamente, vendía- me doy cuenta de que no existen productos mas tristes, pobres, chabacanos y mediocres que estos… Como en todo sub-género, naturalmente siempre hay alguna joyita a tener en cuenta. No es el caso de esta NEUMONIA EROTICA Y PASOTA, un coñazo de padre y muy señor mío, que al contrario que pasa con el porno convencional, aquí tenemos que darle al Fast fodward en las escenas de folletéo, porque la verdadera chicha está en los diálogos y en la supuesta historia. La película, eso si, toma como suyas montones de referencias a la cultura popular de aquellos años, y si bien el argumento toma como base el clásico del porno GARGANTA PROFUNDA (En la que una mujer tiene el clítoris en la garganta y necesita hacer tremendas felaciones para alcanzar el clímax. La exposición del argumento en esta,no es exactamente lo mismo, pero si similar), también cuenta con guiños considerables a la serie EL INCREIBLE HULK, siendo además un repugnante “Exploited” que pretende enriquecerse a costa de tomarse a chufla el celebre caso de las intoxicaciones por aceite de colza y sus efectos en quienes lo tomaron. Desde luego, no se puede ser más despiadado a la hora de hacer una película.
En pleno (Y moderno, y costero, y hortera…) verano, las parejas se lo pasan bien practicando el sexo libre y siendo un poco idiotas, pero una partida de aceite de colza desnaturalizado, ha hecho que nuestra protagonista (Eva Liberten, musa del “S”), que a tomado este aceite, se convierta en un repugnante, rosado y tetudo monstruo, cada vez que, estando ella excitada, alguien ejerce algún tipo de violencia. Así de tonto y estúpido. Entre tanto, parejitas de diversas orientaciones sexuales, practican sexo de manera casi gilipollas.
En realidad estas películas eran para lo que eran: mostrar toda la chica posible, sin pasarse, mostrar una libertad sexual tras años de represión, y que las parejas se metieran mano mientras la veían en su correspondiente cine de barrio.
Como película, absolutamente insoportable, como producto una aberración ¿El título tan molón? Lo mejor de la película. No hace falta ni que se molesten en verla, es perder el tiempo.
Como anécdota, destacar la presencia gratuita (porque aparece en la pelicula, pero si no apareciese, tampoco pasaría nada) de Víctor Israel.
Dirige Jaime Bayarri, responsable de algún sub-producto más, sin mayor trascendencia.
En pleno (Y moderno, y costero, y hortera…) verano, las parejas se lo pasan bien practicando el sexo libre y siendo un poco idiotas, pero una partida de aceite de colza desnaturalizado, ha hecho que nuestra protagonista (Eva Liberten, musa del “S”), que a tomado este aceite, se convierta en un repugnante, rosado y tetudo monstruo, cada vez que, estando ella excitada, alguien ejerce algún tipo de violencia. Así de tonto y estúpido. Entre tanto, parejitas de diversas orientaciones sexuales, practican sexo de manera casi gilipollas.
En realidad estas películas eran para lo que eran: mostrar toda la chica posible, sin pasarse, mostrar una libertad sexual tras años de represión, y que las parejas se metieran mano mientras la veían en su correspondiente cine de barrio.
Como película, absolutamente insoportable, como producto una aberración ¿El título tan molón? Lo mejor de la película. No hace falta ni que se molesten en verla, es perder el tiempo.
Como anécdota, destacar la presencia gratuita (porque aparece en la pelicula, pero si no apareciese, tampoco pasaría nada) de Víctor Israel.
Dirige Jaime Bayarri, responsable de algún sub-producto más, sin mayor trascendencia.
lunes, 4 de julio de 2011
HYSTERICAL
Los Hudson Brothers eran un trío de mediocres comediantes/músicos (algo así como la “Trinca” nuestra pero en yankee) que asolaron los USA durante finales de los 70 luciendo looks de esos tan acordes a su época, mostachos enormes, greñas cutres, pantalones acampanados, cuellos de camisa tamaño Big Mac, etc, etc. Vivieron un éxito efímero, lo que no les impidió participar en un par de pelis, una de las cuales (en la que son absolutos reyes de la función) es esta “Hysterical”. Después de aquello su popularidad comenzaría a descender, aunque actualmente el legado de los Hudson sigue patente en Hollywood gracias a la actriz Kate Hudson, hija de uno de los hermanos, Bill, como resultado de su matrimonio con Goldie Hawn. ¡Lo que son las cosas del corazón en la meca del cine!.
“Hysterical” es, ante todo, una comedia, o mejor una parodia del cine de terror. La historia es lo de menos, ya que habla de la llegada de un escritor con problemas de inspiración a un pueblecito maldito por la presencia del fantasma de un farero (el inimitable Richard Kiel, el Tiburón de las películas de James Bond con Roger Moore) y su amante asesinada (Julie "Catwoman" Newmar). De por medio tenemos a dos “investigadores de lo paranormal” que acuden esperando desentrañar el misterio. Hasta ahí todo normal, pero la continua sucesión de gags idiotas o, ya directamente, la apabullante alusión a pelis del género (“El Exorcista”, “Tiburón” –por cierto, el actor que interpretaba al estresado alcalde en aquella, Murray Hamilton, repite papel aquí-, “Viernes 13”, con el tonto del pueblo que no cesa de soltar lo de “Estáis predestinados!”, “Poltergeist”, cualquiera de zombies...) y no tan del género (“Taxi Driver”, "El estanque dorado" o “En busca del arca perdida”, con los investigadores de turno disfrazados de Indiana Jones) hacen de esta peli un divertimento a base de humor extremadamente chorril (ver la secuencia de Drácula –interpretado por el actor de comedia Charlie Callas, habitual de Mel Brooks- para hacerse una idea) que, por lo menos, te entretiene durante sus 90 minutos. Curiosamente, en su momento se vendía como "para todos los públicos", aunque los chistes picantes y los tacos andan a sus anchas.
“Hysterical” es, ante todo, una comedia, o mejor una parodia del cine de terror. La historia es lo de menos, ya que habla de la llegada de un escritor con problemas de inspiración a un pueblecito maldito por la presencia del fantasma de un farero (el inimitable Richard Kiel, el Tiburón de las películas de James Bond con Roger Moore) y su amante asesinada (Julie "Catwoman" Newmar). De por medio tenemos a dos “investigadores de lo paranormal” que acuden esperando desentrañar el misterio. Hasta ahí todo normal, pero la continua sucesión de gags idiotas o, ya directamente, la apabullante alusión a pelis del género (“El Exorcista”, “Tiburón” –por cierto, el actor que interpretaba al estresado alcalde en aquella, Murray Hamilton, repite papel aquí-, “Viernes 13”, con el tonto del pueblo que no cesa de soltar lo de “Estáis predestinados!”, “Poltergeist”, cualquiera de zombies...) y no tan del género (“Taxi Driver”, "El estanque dorado" o “En busca del arca perdida”, con los investigadores de turno disfrazados de Indiana Jones) hacen de esta peli un divertimento a base de humor extremadamente chorril (ver la secuencia de Drácula –interpretado por el actor de comedia Charlie Callas, habitual de Mel Brooks- para hacerse una idea) que, por lo menos, te entretiene durante sus 90 minutos. Curiosamente, en su momento se vendía como "para todos los públicos", aunque los chistes picantes y los tacos andan a sus anchas.
La película incluía un número musical con zombies bailoteando, finalmente extirpado. Sacro error, de haberlo dejado se habrían adelantado al famoso "Thriller" de Michael Jackson. Anda disponible en youtube.
No puedo resistirme a mencionar algunas joyas, tales como la escena del exorcismo, la absurda idea de que el proceso de transformación a no-muerto incluye que se te pongan las cejas blancas, se te suba el cuello de la camisa y digas “Me impogta un cagajo” (¿!!?), la cena durante la que el prota va siendo poseído poco a poco o, cómo no, la divertida canción que los hermanos Hudson improvisan delante de los zombies porque, dicen, “La música les amansa”.
¿A que te mueres por verla?.
Para ilustrar la reseña he puesto el cartel que veis porque me encanta... pero si somos justos, este que hay aquí debajo (escaneado de mi flamante VHS) fue con el que se la conoció durante su fugaz estreno (y su periplo videográfico). Y también mola, claro.
No puedo resistirme a mencionar algunas joyas, tales como la escena del exorcismo, la absurda idea de que el proceso de transformación a no-muerto incluye que se te pongan las cejas blancas, se te suba el cuello de la camisa y digas “Me impogta un cagajo” (¿!!?), la cena durante la que el prota va siendo poseído poco a poco o, cómo no, la divertida canción que los hermanos Hudson improvisan delante de los zombies porque, dicen, “La música les amansa”.
¿A que te mueres por verla?.
Para ilustrar la reseña he puesto el cartel que veis porque me encanta... pero si somos justos, este que hay aquí debajo (escaneado de mi flamante VHS) fue con el que se la conoció durante su fugaz estreno (y su periplo videográfico). Y también mola, claro.
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