Sin lugar a dudas, esta es una de las películas mas extrañas que he visto en mi vida. Algo así como un “torture porn” real y por lo tanto sin que muera nadie, pero en realidad terapia según su director Kilo Goifman.
Ahora, al ver la peli, brasileña, a pelo y sin subtítulos, me cuesta un poco detectar si es un documental, o bien un falso documental… creo que es más bien lo segundo, añadiéndole la intención del director por hacernos creer que es lo primero.
En la peli, mientras el equipo de filmación rueda, se somete a un grupo de personas a enfrentarse a sus fobias. Así, si una chica tiene pánico a las serpientes se la inmovilizará al lado de una serpiente. ¿Miedo a los payasos? Pues se le ata al individuo delante de un cristal en el que un desagradable payaso se reirá de el histéricamente. Para el tipo que tiene miedo a las ratas, fabrican una especie de colchón el cual llenarán de ratas y atarán al tipo para que descanse sobre el. Una mujer tiene miedo a las cuchillas de afeitar, así que… y así un sin fin de torturas terapéuticas, rodadas de manera totalmente experimental, sin importar que veamos en pantalla al equipo técnico y comentando las jugadas entre toma y toma. Además para más inri en la sala de montaje, el director es aconsejado nada mas y nada menos de por José Mojica Marins haciendo incomprensiblemente de Ze do Caixao, que curiosamente, película brasileña que decido ver, película brasileña en la que aparece Marins.
Bien, tal y como lo cuento, parece todo muy atractivo e interesante, pero no se dejen engañar por un bonito planteamiento. Aunque FILMEFOBIA es una bizarrada de las mas grandes que he visto, en realidad es un coñazo inaguantable al que al final hay que acabar viendo a base de fase fordward.
Pero por curiosidad, hay que echarle un vistacillo.
Ahora, al ver la peli, brasileña, a pelo y sin subtítulos, me cuesta un poco detectar si es un documental, o bien un falso documental… creo que es más bien lo segundo, añadiéndole la intención del director por hacernos creer que es lo primero.
En la peli, mientras el equipo de filmación rueda, se somete a un grupo de personas a enfrentarse a sus fobias. Así, si una chica tiene pánico a las serpientes se la inmovilizará al lado de una serpiente. ¿Miedo a los payasos? Pues se le ata al individuo delante de un cristal en el que un desagradable payaso se reirá de el histéricamente. Para el tipo que tiene miedo a las ratas, fabrican una especie de colchón el cual llenarán de ratas y atarán al tipo para que descanse sobre el. Una mujer tiene miedo a las cuchillas de afeitar, así que… y así un sin fin de torturas terapéuticas, rodadas de manera totalmente experimental, sin importar que veamos en pantalla al equipo técnico y comentando las jugadas entre toma y toma. Además para más inri en la sala de montaje, el director es aconsejado nada mas y nada menos de por José Mojica Marins haciendo incomprensiblemente de Ze do Caixao, que curiosamente, película brasileña que decido ver, película brasileña en la que aparece Marins.
Bien, tal y como lo cuento, parece todo muy atractivo e interesante, pero no se dejen engañar por un bonito planteamiento. Aunque FILMEFOBIA es una bizarrada de las mas grandes que he visto, en realidad es un coñazo inaguantable al que al final hay que acabar viendo a base de fase fordward.
Pero por curiosidad, hay que echarle un vistacillo.