viernes, 28 de octubre de 2011

JASON VS JASON X

La editorial de comics Avatar se especializa en historias duras donde el gore y la casquería campan a sus anchas. Así que es probablemente la más indicada para realizar las adaptaciones a papel de películas de horror como Viernes 13, Pesadilla en Elm Street, La Matanza de Texas o todo lo relacionado con La noche de los muertos vivientes. No viven solo del horror, ya que también se encargan de los comics de Stargate, o Robocop. Además cuenta con artistas "independientes" (que van a su bola) a los que dejan hacer sus obras, como Alan Moore, Warren Ellis o Garth Ennis. Pero como digo, principalmente son conocidos por las adpataciones de las películas de miedito. Y para rizar el rizo, el dibujante de estas adaptaciones es siempre el mismo, Mike Wolver, del que más adelante comentare que me parece su trazo.

La historia de Jason Vs Jason X es muy loca, tanto que tras releerlo en tres ocasiones (la componen dos comics de 24 paginas cada uno) aun no me queda claro de donde sale Jason. Jason X si que se explica, pero el original aparece de la nada. Pero empecemos por el principio. El comic sigue donde acabo la maravillosa Jason X (que incomprensiblemente no hemos reseñado aun por aquí) . La nave de la película vaga por el espacio hasta que unos "piratas espaciales" entran para llevarse todo lo que puedan rapiñar. Lo que no saben es que los restos que quedan de Jason X vuelven a caer dentro de la maquina que lo transformo en mitad monstruo mitad metal, y se vuelve a repetir el proceso. Así que ya tenemos a Jason X dando estopa a los rateros. Solo una consigue escapar en la nave que habían venido, pero Jason X ira de polizón con ella. Y no solo Jason X, sino que el Jason original también esta ahí (como ha llegado allí es lo que no entiendo) La superviviente llega hasta una nave tipo crucero de placer que se dirige a Tierra-2. Es entonces cuando Jason y Jason X se ven las caras. Cada uno tiene visiones de su madre en los que les cuenta su origen, pero son recuerdos fragmentados. Solo saben que tienen que matar para que no les hagan daño. Así que en su pelea, ya que cada uno ve al otro como la mayor amenaza de la nave, van decapitando, desmembrando y desviscerando a los pasajeros y tripulación.

Todo es una excusa para tener viñetas y viñetas de machetes abriéndose paso entre cuerpos e intestinos, y eso es algo que Wolver no dibuja nada mal. En lo que para mi cojea más es en las caras, su trazo para estas o para un cuerpo entero, es vago, simple. Parece que sino esta hecho trocitos no se molesta tanto. Puede que el coloreado tenga mucho que ver también, con colores planos y sin apenas sombras, solo unas degradaciones de color que dan un aspecto artificial, como de plástico, no se es algo raro, que probablemente tenga más culpa el entintado y el color que el dibujo de origen.

Estos comics son para lo que son, desfogarse durante cinco minutos y poco más. No serán recordados por su historia, pero al menos en este caso concreto nos ponen frente a frente las dos versiones de un mismo serial-killer. Si quieres saber quien gana tendrás que leértelo (o ya lo hablaremos en los comentarios si os apetece)