Sueco de nacimiento, fan de Ingmar Bergman y de la Nouvelle Vague, pertenece esa clase de cineastas que durante finales de los 60 e inicios de los 70 rompieron tabúes sexuales con sus películas. Ellos lo vendían y justificaban como arte, pero a la hora de la verdad era el puro morbo lo que las hacía triunfar en los cines. La peña iba en masa a verlas, pero no para culturizarse, sino para cascársela a falta de nada más directo y explícito.
De esta guisa, Sjöman se hizo famoso especialmente con dos films, “Soy curiosa amarillo” del 76, una peli de temática política pero con generosos desnudos y escenas de sexo muy realistas, y su secuela -mira, como una de “Viernes 13”!!- “Soy curiosa azul”. Pamplinas.
Siguió explotando esta vena, en el nombre del arte, y el año 1971 realizó la peli de la que hoy les ofrecemos los fotocromos, ”Troll"... nada que ver con la de John Carl Buechler (probablemente más entretenida). Una farsa sobre una pareja recién casada que creen que morirán si fornican. La gracia es que todos los actores implicados venían del mundo de la ópera.
En España no perdimos el tiempo y la promocionamos haciendo directa alusión a la pornografía, por si alguien aún no lo había cogido. Y que no falten ni las imágenes censuradas a base de Carioca ni la entrañable etiqueta "Clasificada S".
Los tiempos comenzaron a cambiar y al colega Vilgot se le acabó el chollo. Sus pelis dejaron de funcionar tan bien a la hora de recaudar dineros. Aguantó hasta 1995, se retiró y falleció.
No es que los fotocromos flipen. Ni que uno pueda pajearse con ellos. De hecho, dudo que viera la película, no suelen gustarme estas cosas raras europeas entre lo arty y lo exploitation tan propias de los años 70, pero es una peli extraña y a nosotros nos molan las pelis extrañas y las causas perdidas (no hay más que vernos), por eso les dejamos aquí los fotocromos de "Troll" (solo falta uno, mal escaneado).
¡Mycket nöje!.