El pasado fin de semana emitían en un canal de television la película Heidi. En plan de cachondeo le dije a mi mujer, "Pon la de Heidi que total para lo que están dando." En esto que cambia de canal y justo estaba empezando. Como ciertamente no daban nada mejor nos pusimos a verla.
-Esta gordita Heidi ¿eh?
-Si, pero la chavalilla es guapa.
-No, si viene perfecto, el personaje también era rellenita.
-Oye y el abuelo ¿No te suena de algo?
-Coño, si. Es Max Von Sydow. Ostias pero de cuando es esta película?
-No lo se, pero calla que ahora aparece Pedro.
Y exacto allí estaba Pedro, un chavalillo entre rubio y pelirrojo, mas de pueblo que las amapolas y que rápidamente entabla amistad con Heidi.
-Que majo es Pedro.
-Que dices!!! Ese solo quiere traginarsela.
-Mira que eres burro. Anda si ahora vuelve la zorra de la tía a llevarse a Heidi.
-Pues a ver que tal esta la actriz que hace de Clara.
Pues Clara era una niña bastante feuchona, la verdad. Que yo recuerde en la serie de dibujos (el libro no lo leí nunca) era una chica rubia de ojos enormes y parecía guapa.
-Miraaaa!!! si la Rotenmeyer es la hija de Chaplin.
-Geraldine Chaplin.
-Que?
-Que se llama Geraldine Chaplin.
-Ah!
En esta adaptación Rotenmeyer mas que dar miedo, da un pelin de risa, no por la actuación de Geraldine Chaplin, dios me libre de decir que lo hace mal, sino que su personaje se convierte en una mujer estirada, que acaba siendo apaleada por todos, el padre de Clara, la abuela de Clara, los gatos que mete en casa Heidi... Lo dicho, no da miedo, pero no se me ocurre mejor rostro para Rotenmeyer que el de Geraldine Chaplin.
-Mira ahora se van todos para las montañas.
-Si, la peli va a toda ostia, a este paso Clara aprende a andar el primer día.
-El primero no, pero si el segundo, mira.
-Joder, los Alpes son mejor que ir a Fatima.
Y se acabo la película. Tuvimos ocasión de cambiar en cualquier intermedio, pero nos había enganchado tanto que no hicimos ni zapping. Perdón, miento, si que cambiamos en algún momento, y creo que estaban dando el "Donde estas corazón" o alguna mierda de esas. No tardamos ni medio segundo en cambiar para continuar viendo una historia que ya conocíamos pero con nuevas caras. Todo empezó como una coña y nos la vimos entera, y nos gusto. Nunca digas nunca jamas (salvo que sean las Bratz)