jueves, 19 de enero de 2012

LA HORA MÁS OSCURA

La única referencia que yo tenía de este film, era el bonito póster que adornaba las marquesinas del metro. Una chica pasándolas putas entre preciosos rayos eléctricos, todo envuelto en unos colores y con una estética entre lo setentero y el video-club, con un tufillo, no obstante, actual muy atractivo y sugerente. Y es que efectivamente, lo mejor de LA HORA MÁS OSCURA (que el título aunque espantoso, es tan sugerente como el póster), es el mismo póster.
No quise leer más acerca de la película, evité ver el trailer y decidí ir a verla ayer por la tarde al cine totalmente entregado. Y en 3-D, que rápido ha pasado de moda y que no garantiza una mierda.
Y me encontré, como era de esperar, con otra mierda más de las muchas que pueblan la cartelera hoy en día.
Dos jóvenes innovadores, como si de los creadores de facebook se tratara, viajan a Moscú a vender un programa informático totalmente revolucionario. Cuando llegan allí, resulta que la empresa de marras, aprovechándose de los vacíos legales de Rusia, ya han sacado el programa por su cuenta, y nuestros chavales no verán un puto duro, por lo que frustrados, se van a una discoteca en la cual conocen a unas tías.
Justo a la salida, tras un apagón, aparecen en la calle unas extrañas luces alienígenas que reducen a polvo todo lo que se cruza en su camino. El resto de la película se la pueden imaginar; los chavales intentando sobrevivir por las desiertas calles de Moscú, encontrándose con otros supervivientes e ingeniándoselas para destruir las lucecitas de la mejor manera posible.
Obviamente, es más una película de ciencia ficción que de terror. Da lo mismo, porque es tan inofensiva y previsible, tan llena de tópicos y de escenas que ya hemos visto antes en otras películas, y de resoluciones tan autocomplacientes y absurdas, que aunque mantiene el ritmo y tiene un acabado técnico más o menos bueno, cuando acaba te quedas más frío que cuando entraste, y eso que estos días, las tardes son de 0 grados.
Quizás los artífices de esto lo sabían y por eso diseñaron un póster tan bonito y atractivo.
Por otro lado, me ha cabreado la película por motivos meramente “cascarabiosos”. Los protagonistas son treintañeros que manejan la tecnología a la perfección. Sobretodo el tema teléfonos móviles…. Utilizan durante el argumento aplicaciones y gadgets de rabiosa actualidad que en la vida diaria se usan y que se de su existencia porque he oído campanas, pero ni entiendo al 100% su utilidad y me cuesta comprender su funcionamiento. Viendo esta película, me he dado cuenta de que me voy haciendo mayor, y que el publico mayoriatario al que va destinada esta película que es el adolescente, recibe estas escenas con total normalidad (si alguien está al corriente de las bondades del tal “Wassup”, que se las ahorre en los comments).
Por otro lado, y esto lo digo como algo positivo, la película, al igual que MI AMIGO MAC, es un jodido spot de Mc Donalds. En prácticamente todos los exteriores de Moscú, la cámara se encarga de mostrarnos bien visibles,eso si, en ruso, anuncios y carteles de la famosa cadena de restaurantes anunciando una de sus mas recientes creaciones; el rollito ese con pollo y bacon, con un descaro, que no me explico como nadie de la platea ha protestado… quizás era porque prácticamente estaba solo en el cine.
Dirige Chris Gorak, director artístico de mogollón de películas mainstream, que rodó otra película antes que esta.