Película de Antonio del Real, al estilo de Antonio del Real, y que a juzgar por el póster, se las promete mucho mas alocada y desmadrada de lo que en realidad es.
En los ochenta se pusieron de moda las comedias ambientadas en clínicas y hospitales, y a rebufo de LOS LOCOS DEL BISTURÍ, aquí en España se rodaron AGÍTESE ANTES DE USARLA y esta.
También es sabido que en España en aquellos años, los personajes de actualidad de la tele y el mundo del espectáculo eran también rentables en la taquilla, y por eso esta película es un perfecto vehículo de lucimiento para el popular Dr. Cabeza, que protagoniza la cinta.
Alfonso Cabeza, era un doctor real, que para más inri era presidente del Atlético de Madrid y un polemista nato. Su fama era tal, que a algún productor despiadado se le ocurrió que una película con el a la cabeza (valga la redundancia) podía ser un éxito de taquilla.
Un actor para hacer un fraude a la seguridad social, se hace pasar por enfermo en diversas clínicas y hospitales. Esta vez da a parar a uno cuyos directivos son los individuos más corruptos del mundo. Pensando estos que este es en realidad un inspector del ministerio de sanidad, planean hacerle chantaje, y con dicha confusión, tenemos el enredo en bandeja. Por otro lado, dos macarras convencen al actor para atracar las arcas del hospital, y salir de allí juntos con el botín.
No está nada mal la película. Obviamente, el papel del doctor Cabeza es secundario, pero resultaba muy atractivo, a priori, para la taquilla, pero no recaudó lo esperado.
En realidad se trata de una película que denuncia los chanchullos de la seguridad social y las irregularidades en las intervenciones médicas, pero como está camuflada de comedia, nos lo pasamos teta con la película, máxime cuando esta tiene sus contadas dosis de humor negro, gore y escatología (que no hay nada mas gracioso que hacer chistes sobre las entrañas de un individuo al que están haciendo una autopsia).
De una coralidad absoluta, en el reparto nos encontramos con un grupo de grandes de la época, Juanjo Menéndez, Antonio Gamero, un excelente Carlos Larrañaga, una de las actrices mas bellas del cine Español; Isabel Luque, Agustín González, y un primerizo, y sorprendentemente gracioso Antonio Banderas que empezaba su fructífera carrera tras trabajar con Almodóvar, y que da vida a uno de los macarras que planean el atraco, con acento Andaluz, y con una bis cómica, que ya nunca se volvería a vislumbrar. Vale que en TWO MUCH está gracioso, pero en esta, mama del humor de sal gruesa que se estilaba en España aquellos años.
Rodada con oficio y solvencia, deja un buen sabor de boca tras el visionado. Y, coño, que es un tipo de cine que ya no se hace, y que debería hacerse.