La diferencia de este largometraje con los de los
americanos, no solo es presupuestaria o de telento, sino también de actitudes
(y aptitudes) y si a los Wingard y West de turno, les puede cierto hipsterismo,
cierto halo de respetabilidad artística, a los Méxicanos les puede el tener
menos personalidad que un lapiz gastado. El post-modernismo más feroz se
apodera de la película, así como la, ya rancia, influencia de los Tarantino y Rodríguez
de “Abierto hasta el Amanecer” o de “Grindhouse”. Si, amigos míos… “Mexico
Bárbaro” tiene hasta un episodio en el que se le mete al HD (formato este que
roba la entidad de los autores porque todo luce bonito con este vídeo) ese
odioso y manido filtro para envejecer la imagen a base de rayas de celuloide
gastado y polvo (¡Ya está bien de esa mierda, por favor, que parecéis todos
imbéciles!), así como todos los clichés del género, así como un capítulo en
blanco y negro, como si los directores fueran todos estudiantes de cine de esos
que no han visto una puta película que no sea de Tarantino.
Incluso, en la película hay un velado homeje a “Troll 2”, en
el episodio más vergonzante de la cinta.
Sin embargo, y destacando también las virtudes de la
película, destacaré todo el trabajo concerniente a los F/X y el maquillaje, a
veces muy logrado y totalmente sorprendente, totalmente alejado de lo que es en
sí el proyecto del que ahora escribo y dejando el pabellón Mexicano muy alto en
lo que a efectos especiales de bajo presupuesto se refiere. Hay un fantasma en
la película, que de bien resuelto hace a uno quitarse el sombrero.
Por otro lado, con tanta historia, el largometraje, cercano
a las dos horas de duración, se hace eterno, máxime cuando algunos de los capítulos
no parecen terminar nunca del escaso sentido del tempo que pueda tener su
director, no siendo el largometraje compensado con los de menos duración, que,
efectivamente, son los mejores.
No voy a enrollarme desgranando aquí todos y cada uno de los
episodios, que para aburrirse siempre será mejor que vean la peli, pero les
diré que en ellos vemos Narcos, fantasmas, vagabundos caníbales, duendes del
bosque violadores, espíritus que exigen
sangre del coño de tu madre, muñecas descabezadas, burdeles, un plagio de la
anteriormente nombrada “Abierto hasta el amanecer, Vaqueros a los que se les
aparecen extraños seres, etc, etc, etc….
Algunos de los episodios mostrados son mejores, otros
peores, pero en general, el conjunto es bastante aburrido, aunque hay que
reconocer la calidad técnica de algunos de los capítulos.
Como largometraje, es duro de soportar, por separado,
algunos capítulos funcionarían mejor, pero desde luego, no hay ninguno que sea
una obra maestra.
Dirigen los diferentes segmentos Jorge Michel Grau, Isaac
Ezban, Laurette Flores Born, Ulises Guzmán, Aaron Soto, Edgar Nito, Gigi Saul
Guerrero y Lex Ortega, Casi nada.
La película fue exhibida en el festival de Sitges en sección
oficial en 2014, y tampoco es que hiciera mucho ruido tras ello.
Mala.