La segunda entrega de las aventuras españolas de Parchís, deja la innovación a un lado y nos ofrece exactamente lo mismo que la anterior, pero acentuando aquellos gags, chascarrillos, o personajes que habían sido más celebrados en los cines con “La primera guerra”. Por ello, el triunvirato roba planos y protagonista, que deja un poco de lado al resto, lo forman Tino, El flaco y el perro Superman. Un Perro, un gordito ajeno al grupo y al líder de este, que pronto despegaría de allí, para fracasar como solista adolescente. Por eso, al dejar a cuatro de los componentes de un grupo infantil arrinconados, y dar mas protagonismo a elementos secundarios, llego a la conclusión de que el éxito de estas películas no estaba en tener en sus filas a Parchís, si no en el buen hacer de Aguirre.
Esta vez, Don Atilio considera el subir la cuotas de su colegio, con lo que muchos niños se quedan sin acceso a el, y claro, Parchís tienen que cambiar el viaje a Disney World que acaban de ganar en un concurso de jóvenes talentos, por el segundo premio que son 300.000 pesetas, y así pagar las cuotas que faltan y solucionado. Pero la rabia les inunda y deciden recuperar el dinero de la única forma que saben: Delinquiendo, extorsionando y usando la violencia.
Mas de lo mismo, pero con un poquitín mas de espectáculo (solo un poco más), con el gordo dando estacazos en la cabeza a los mismos personajes y en definitiva, más que una secuela un remake de LA GUERRA DE LOS NIÑOS, que a poco que sintamos nostalgia, disfrutaremos de lo lindo.
Esta vez, Don Atilio considera el subir la cuotas de su colegio, con lo que muchos niños se quedan sin acceso a el, y claro, Parchís tienen que cambiar el viaje a Disney World que acaban de ganar en un concurso de jóvenes talentos, por el segundo premio que son 300.000 pesetas, y así pagar las cuotas que faltan y solucionado. Pero la rabia les inunda y deciden recuperar el dinero de la única forma que saben: Delinquiendo, extorsionando y usando la violencia.
Mas de lo mismo, pero con un poquitín mas de espectáculo (solo un poco más), con el gordo dando estacazos en la cabeza a los mismos personajes y en definitiva, más que una secuela un remake de LA GUERRA DE LOS NIÑOS, que a poco que sintamos nostalgia, disfrutaremos de lo lindo.